Entre el 19 y el 21 de noviembre de 1985 se celebró la histórica reunión entre el líder de la URSS, Mijaíl Gorbachov, y el presidente de EEUU, Ronald Reagan. Fue la primera de una serie de cumbres que cambiaron drásticamente las relaciones bilaterales y todo el panorama internacional. ¿En qué situación están los dos países a día de hoy?

 

La reunión de hace 33 años marcó el inicio de una nueva era en las relaciones entre EEUU y Rusia, que más tarde llevó a que las dos superpotencias cambiaran el conflicto de la Guerra Fría por una política de concesiones y acuerdos.

 

Sputnik conversó con varios expertos para evaluar las relaciones actuales entre los dos países.

 

Moscú como una amenaza

 

Según Evgueni Kozhokin, profesor titular de la Universidad MGIMO, Washington siempre ha visto una amenaza en Moscú.

 

«Incluso después de estas reuniones, EEUU, en sus doctrinas, seguía considerando a la URSS como potencial amenaza. Independientemente del componente ideológico, nuestro país siempre ha sido considerado potencialmente peligroso por parte de EEUU».

 

Tratado INF

 

Recientemente, el presidente de EEUU, Donald Trump, declaró que su país abandonaría el Tratado INF, firmado por Washington y Moscú en 1987, que prohíbe a las partes disponer de misiles balísticos terrestres o misiles de crucero con un radio de acción de entre los 500 y los 5.500 kilómetros.

 

Kozhokin opinó que Estados Unidos «lo ve de manera pragmática: si un acuerdo impide la modernización de armas estadounidenses, lo abandonan. Es lo que pasó con el acuerdo sobre la defensa antimisiles y ahora llega el turno del INF, que también contradice ciertas innovaciones tecnológicas de EEUU».

 

Para el profesor universitario, la única barrera actual es la oposición de los europeos a la salida de EEUU, pero los estadounidenses «prestan cada vez menos atención al punto de vista de sus aliados».

 

El analista político Fiódor Lukiánov, por su parte, considera real e irreversible la salida de EEUU del Tratado INF. Según él, aunque el pretexto formal es la supuesta violación del acuerdo por parte de Rusia, la causa real está en Asia y, en particular, en China, que desarrolla este tipo de misiles.

 

«La esfera nuclear ha dejado de ser solo bilateral. Quienes se oponen al tratado señalan que es raro que dos países se comprometieran a no tener cierto tipo de misiles, mientras que otros países los tienen, como China, la India e Irán. Así que esto tiene su lógica», comentó a Spuntik Lukiánov, editor jefe de la revista ‘Rusia en la política global’ y director de trabajo científico del Fondo de desarrollo y apoyo del club Valdái.

 

Destrucción del modelo de control de armas

 

Según Lukiánov, tras el abandono de EEUU del Tratado INF, «dejará de estar vigente el Nuevo START y acabará todo el modelo de control de armamento que se desarrolló en los años 60 tras la crisis del Caribe. En este contexto, una pregunta muy importante sería qué es lo que lo sustituirá».

 

Lukiánov observó que volver a firmar el Tratado con la participación de China sería imposible, porque el gigante asiático no piensa estampar su firma en nada, y además es complicado hacerlo a nivel multilateral, dado que este proceso llevaría años.

 

Equilibrio de miedo y potencia

 

Ambos expertos señalaron que, en comparación con la situación de hace más de 30 años, actualmente el equilibrio de armamento está roto.

 

«Entonces había un equilibro de miedo y potencia. El entendimiento de que un conflicto provocaría consecuencias fatales para todos empujaba hacia una búsqueda de remedio».

 

Ahora, según el analista, no hay ningún equilibrio en ninguna parte: ni entre Rusia y EEUU, ni entre China y EEUU. Por todas partes los desafíos son asimétricos y complicados, añadió.

 

Mientras tanto, Kozhokin opinó que «las relaciones entre EEUU y Rusia pueden ser estables solo si EEUU reconoce la fuerza de Rusia».

 

«Si Rusia se muestra débil, nuestras relaciones con EEUU seguirán empeorando y serán aún más problemáticas. Un filósofo francés nada izquierdista calificó correctamente a EEUU como república imperial y esto sigue sin cambiar», concluyó el experto, en referencia a las palabras de Raymond Aron.

 

(Sputnik News)