A propósito del naufragio que sufrió un ferry en Birmania el pasado 15 de octubre, este lunes los equipos de rescate presentaron un nuevo balance que indica la cantidad de 32 personas fallecidas, sin embargo, Willy Frient, responsable de las operaciones de salvamento, expresó que “el balance puede ser mucho más grave cuando se reflote el barco”.
El hundimiento, se llevó a cabo al oeste de ese país, en el río Chindwin entre el trayecto de Homalin y Monywa, en el centro del país, indicaron las autoridades, y se calcula que aproximadamente 250 personas, eran las que se transportaban en el ferry, a pesar de que estar diseñado para solo 150 personas.
Entre los pasajeros se hallaban estudiantes, docentes, y también obreros que volvían a casa para celebrar el festival de Thadingyut, durante el cual los budistas, mantienen linternas de papel y velas encendidas, para celebrar el descenso del cielo de Buda.
Asimismo, el director de los servicios de urgencia, informó que cuatro miembros de la tripulación fueron detenidos, mientras las autoridades buscan a otro miembro y al propietario del barco.
“No sé nadar y tuve que aferrarme a un pedazo de plástico. Me salvó el barco de los socorristas”, expresó una sobreviviente de nombre Hnin Ley Yee llorando después de reconocer el cuerpo de su hija en la morgue.
Hasta el momento han sido rescatadas 154 personas.
