El viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, ha declarado al diario Kommersant que si Estados Unidos se retira del tratado sobre Misiles de Alcance Medio y Corto (INF, por sus siglas en inglés), Rusia no podrá ignorar un posible despliegue de ese tipo de proyectiles estadounidenses si amenazan a Moscú o sus aliados.

 

Si se da esa situación «nos veremos obligados a tomar medidas efectivas de naturaleza compensatoria», ha indicado el también vicecanciller de Rusia.

 

«Incluso suponiendo que, a día de hoy, Washington y sus aliados» no tienen planes de desplegar sus misiles de medio y corto alcance en Europa, «no podemos descartar que les surjan esas ideas en el futuro, en función de los profundos cambios hacia peores condiciones de seguridad en la Europa Atlántica, la continua actitud antirrusa del Congreso de EEUU y las manifestaciones rusófobas que prevalen en la OTAN «, ha añadido Riabkov.

 

Antecedentes

 

Para Serguéi Riabkov, la intención de Washington es un ejemplo de que «en el entorno actual, los acuerdos políticos y hasta los tratados legalmente vinculantes no pueden ofrecer una garantía total e indefinida».

 

A principios de diciembre, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, dio a Rusia dos meses para «volver a cumplir» el tratado INF y advirtió a Moscú de que, en caso contrario, Washington lo abandonaría.

 

Durante los últimos años, Rusia y EEUU se han acusado mutuamente de violar el tratado INF, pero Moscú ha declarado en repetidas ocasiones que cumple estrictamente con sus obligaciones al respecto.

 

El 20 de octubre pasado, el presidente de EEUU, Donald Trump, anunció su intención de retirarse del tratado INF, alcanzado en 1987 entre EEUU y la entonces URSS.

 

Según el Kremlin, la salida estadounidense del pacto es una posibilidad preocupante que convertiría al mundo en un lugar más peligroso. Además, las intenciones de EEUU de abandonar el tratado forzarán a Rusia a tomar medidas de seguridad.

 

(RT)