Rusia tomará medidas de represalia en caso de que Estados Unidos despliegue misiles prohibidos por el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés), dijo este domingo el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov.

 

En una entrevista concedida al canal de televisión Rossiya-1, de Rusia, el ministro de Relaciones Exteriores sostuvo que su país «está bajo la presión constante de quienes la ven como cierto tipo de competidor por alguna posición dominante en la política mundial» y de seguidas añadió que ellos observan tal realidad en «el ejemplo de las acciones estadounidenses», citó la agencia de noticia china, Xinhua.

 

Lavrov lamentó que las naciones europeas «continúen siguiendo la política estadounidense incluso cuando va en contra de sus propios intereses», y puso como ejemplo su votación contra la resolución rusa sobre el mantenimiento del Tratado INF.

 

«Fue en Europa -dijo el alto funcionario ruso- donde escuchamos las mayores preocupaciones sobre la decisión estadounidense de retirarse unilateralmente de este tratado, pero toda la Unión Europea (UE) votó en contra de nuestra propuesta».

 

El 21 de diciembre, la Asamblea General de las Naciones Unidas rechazó una resolución presentada por Rusia en apoyo a la preservación del Tratado INF, lo que generó la decepción de Moscú.

 

Sobre el particular, Lavrov indicó que la decisión de los países de la UE sólo puede explicarse por una «solidaridad falsamente entendida», y agregó que eso básicamente favorece la desaparición del Tratado INF y la continuación del despliegue en Europa de misiles estadounidenses prohibidos en el tratado.

 

«Por supuesto, precisó Serguei Lavrov, el próximo paso sería la respuesta de la Federación Rusa. Esta es nuestra opción, pero las capitales de la UE probablemente no pueden entender la amenaza para la seguridad de los europeos mismos».

 

El Tratado INF fue firmado en 1987 entre la Unión Soviética y Estados Unidos sobre la eliminación de los misiles de alcance intermedio y de alcance más corto. El acuerdo se convirtió en el primer pacto de la historia alcanzado por Washington y Moscú sobre el desarme nuclear y un avance importante en la restricción de la carrera armamentista.

 

(AVN)