En el mes de septiembre una niña siria que vive en la ciudad de Alepo, y su mamá abrieron una cuenta de Twitter para documentar la situación de la ciudad siria desde el punto de vista de la pequeña de siete años, Bana Alabed, sus hermanos y su mamá.
Recientemente, los intensos bombardeos en Alepo llegaron a la familia. El jueves 24 de noviembre Bana publicó la foto de una amiga suya muerta, y puede verse en su Línea de Tiempo un video de ella escondida junto a la cama pidiendo ayuda.
Tras el reporte de varios bombardeos los siguientes días, el domingo 27 de noviembre apareció la imagen de Bana entre mucho polvo, y la pequeña contó que su casa fue destruida por una bomba.
Bana escribió que está bien, y una serie de tuits publicados indican su difícil situación: «Ya no tenemos casa. Estoy levemente herida. No he dormido desde ayer. Tengo hambre. Quiero vivir, no quiero morir. Bana»
En su más reciente tuit Bana muestra una fotografía de unas ruinas, donde dice, que ahí estaba su casa, sus muñecas. La pequeña expresó que se sentía triste, pero contenta de estar viva.
Bana escapaba de la guerra leyendo
A finales de septiembre, cuando lanzó su cuenta, Bana publicó una foto en donde se veía leyendo, acompañada de un texto que decía que lo hacía para olvidarse de la guerra por un tiempo.
El lunes 21 de noviembre, expresó que había visto la película de Harry Potter y que le gustó mucho y le mandó un mensaje a la escritora J.K. Rowling: “Hola @jk_rowling, vi la película de Harry Potter, a Bana le gustaría leer el libro”.
La escritora respondió su mensaje y al ver que no había posibilidad de adquirirlos en Alepo, su asistente medió para enviarle copias digitales de los libros.
El jueves 24 de noviembre, antes de que iniciara el bombardeo que la dejó sin hogar, Bana envió un video vía Twitter, a J.K. Rowling para agradecerle el envío de los libros, y envió una foto de ella con sus hermanos leyendo.
(LaIguana.TV)
