El viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Riabkov, advirtió este jueves que una intervención en Venezuela “sería el peor escenario posible y tendría consecuencias difíciles de predecir”.

 

“Está claro que el uso hipotético de la fuerza en esta situación conducirá a un baño de sangre y a consecuencias que se sentirían más allá de Venezuela”, sentenció Riabkov.

 

Rusia lamentó no poder participar en el llamado Grupo Internacional de Contacto sobre Venezuela, que se reunirá este jueves para buscar «posibles soluciones» a la situación venezolana.

 

“Siendo sincero, esperábamos que Rusia tuviera la oportunidad de sumarse al trabajo que se efectuará hoy en Montevideo, al menos como Estado observador, pero se nos dijo que no iba a haber este tipo de figura”, dijo el funcionario.

 

(LaIguana.TV)