Mientras surgen nuevas pruebas de la complicidad de actores extranjeros en los ataques contra Venezuela, la población de ese país sigue sufriendo. Uno de los últimos de estos sucesos tuvo lugar el pasado 7 de marzo, cuando miles de caraqueños se quedaron a oscuras en el metro de la capital venezolana. RT conversó con los pasajeros afectados para conocer su experiencia.

 

El hecho se había registrado cerca de las cinco de la tarde de esa jornada, cuando el servicio del metro de Caracas quedó totalmente a oscuras, en medio del apagón nacional que, según el Gobierno de Venezuela, se debió a un ataque multidimensional dirigido desde EE.UU. contra el sistema eléctrico nacional.

 

Como consecuencia, decenas de miles de personas que diariamente utilizan esta red de transporte subterráneo se vieron obligadas a buscar una salida hacia la superficie mientras estaban completamente sin luz.

 

Bajo tierra y a oscuras

 

Uno de los usuarios del metro afectado por el apagón relató a RT que en el momento del corte de energía se encontraba dentro del metro pero no tuvo mayores dificultades para continuar su camino a pie, dado que vive cerca. «Pero supe de muchos amigos que tuvieron que caminar los rieles del ferro», añadió.

 

«Desde las cuatro y media de la tarde caminamos hasta que eran las nueve de la noche y llegué a mi casa a la una de la mañana», comentó otra pasajera que no tuvo tanta suerte, ya que se encontraba lejos de su hogar.

 

Tras haber sido energizado nuevamente todo el país, luego de siete días ya todas las líneas del metro de Caracas funcionan con normalidad. Las autoridades relataron a RT cómo fue el proceso de activación de todos los protocolos durante esa contingencia.

 

Protocolo de evacuación

 

«Por supuesto, nuestros trenes se quedan parados en las estaciones», de modo que «tuvimos aproximadamente once desalojos en cada una de las tres líneas», manifestó César Vega González, presidente del Metro de Caracas.

 

«Hubo que realizar el protocolo con el personal de seguridad y de operaciones para evacuar a todos nuestros usuarios y llevarlos hasta las diferentes estaciones más cercanas», añadió González.

 

Al parecer, Venezuela ya ha superado este episodio, que según el Gobierno resultó ser uno de los más graves en la historia reciente. Pero esta semana hubo otro evento, un incendio de grandes proporciones en los tanques de almacenamiento de Petro San Félix, que depende de la estatal PDVSA. Caracas denuncia que es una más de las acciones de Washington para derrocar al presidente Maduro.

 

(RT)