El presidente de EE.UU., Donald Trump, declaró este miércoles que «Rusia tiene que salir» de Venezuela y señaló que «todas las opciones» están abiertas para que eso suceda.

 

Estos pronunciamientos se dan luego que dos aviones militares rusos, con integrantes del Ejército de ese país, aterrizaran en Venezuela el pasado fin de semana, según relató una fuente de Caracas a la agencia RIA Novosti.

 

Al respecto se ha pronunciado la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova. «Antes de sugerir a alguien de irse de algún lugar, EE.UU. debe implementar su propio concepto de salida, en particular de Siria… ha pasado un mes y me gustaría aclarar, ¿salieron o no?», aseveró.

 

La Cancillería rusa informó este martes que especialistas rusos se encuentran en territorio venezolano en concordancia con el tratado existente de colaboración técnica-militar entre ambas naciones, que fue firmado en 2001.

 

«Antes de involucrarse en los intereses legítimos de otros estados, aconsejaría a la Administración de EE.UU. que también concrete libremente las promesas que fueron hechas a la comunidad internacional», añadió Zajárova durante un programa de Piervy Kanal citado por TASS.

 

Robo al pueblo venezolano

 

Por otra parte, la portavoz señaló que países occidentales, con el fin de impulsar un cambio de Gobierno en Venezuela, a menudo citan la tesis de que la población de ese país se encuentra en «condiciones difíciles y horribles», pero al mismo tiempo conspiran para privar a la nación sudamericana de sus recursos básicos.

 

EE.UU., Londres y las estructuras bancarias mundiales bajo la presión de Washington congelaron —llamémoslo diplomáticamente— 30.000 millones de dólares de Venezuela, pero en general simplemente robaron ese dinero, y ahora ofrecen su ayuda humanitaria al pueblo venezolano, ironizó Zajárova. 

 

«Cinismo» e «hipocresía»

 

El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, había señalado a Washington por tratar de «interferir» en este programa de cooperación bilateral, al mismo tiempo que el país norteamericano tiene un gran número de bases militares en todo el mundo y «un presupuesto militar creciente» de más de 700.000 millones de dólares.

 

El ministro venezolano calificó este comportamiento de las autoridades estadounidenses de «cinismo» y expresó además su sorpresa por la «hipocresía» de algunos gobiernos de América Latina, que mantienen en su territorio «buena parte» de las bases.

 

(RT)