La poeta, pedagoga y diplomática chilena y primer Premio Nobel de Literatura de Iberoamérica (1945), Gabriela Mistral, falleció un día como hoy 10 de enero pero del año 1957 en Estados Unidos, debido a un cáncer de páncreas a los 67 años de edad.
Su verdadero nombre era Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, y tomó del también premio Nobel, el escritor francés Frederic Mistral, a quien ella admiraba, su apellido para reemplazar su larguísimo nombre de nacimiento.
“Su obra lírica, inspirada en poderosas emociones, ha convertido su nombre en un símbolo de las aspiraciones idealistas de todo el mundo latinoamericano”, fue la sustentación de la Academia Sueca al momento de concederle el premio.
Mistral escribió en algún momento: “He vivido en una sociedad que me despreciaba por mal vestida y mal peinada”. Ella, una mujer feminista y lesbiana, fue atacada por escribir filosas críticas sociales pero también hermosos relatos infantiles.
A continuación 10 frases para recordarla y mantener vivo su legado:
“Tengo un día, si lo sé aprovechar tengo un tesoro”.
“Tener patria es un regalo al que tarde en tarde hay que corresponder”
“Recordar un buen momento es sentirse feliz de nuevo”.
“El futuro de los niños es siempre hoy. Mañana será tarde”.
“La experiencia es un billete de lotería comprado después del sorteo”.
“Hay sonrisas que no son de felicidad sino un modo de llorar con bondad”.
“Los días más felices son aquellos que nos hacen sabios”.
“La guerra es para distraernos de lo bueno”.
“La educación es, tal vez, la forma más alta de buscar a Dios”.
“Hay besos que producen desvaríos de amorosa pasión ardiente y loca, tú los conoces bien son besos míos inventados por mí, para tu boca”.
(LaIguana.TV)
