Un hombre ha sido detenido y finalmente liberado en España por ayudar a morir a su esposa, enferma de esclerosis múltiple en fase terminal, dolencia que le fue diagnosticada hace 30 años. La mujer, María José Carrasco, de 61 años, le había pedido de manera constante que le ayudara a acabar con su vida, para poner fin a su sufrimiento y tener una muerte digna. De hecho, el pasado mes de octubre, llegó a pedir ayuda para morir ante las cámaras de la televisión pública española.

 

Los hechos se precipitaron después de que el Gobierno del presidente socialista Pedro Sánchez no logra tramitar la nueva ley sobre la eutanasia antes de convocar elecciones generales para el próximo 28 de abril. El matrimonio había estado esperando poder hacer uso de la nueva legislación, pero al verse frustrada, decidieron llevar a cabo la eutanasia por sus propios medios.

 

Ángel Hernández, de 69 años, le suministró a su mujer pentobarbital sódico, una sustancia que es utilizada en los países en los que la eutanasia sí es legal, y que produce una muerte indolora y de forma tranquila. Se la facilitó en un vaso con una pajita para que pudiera beberla. Sin embargo, en España no es legal y solo puede adquirirse a través del mercado negro.

 

El hombre grabó en video la secuencia del fallecimiento de su esposa y tras facilitarle el fármaco llamó a los servicios de emergencia para comunicar el fallecimiento. Los médicos acudieron a su domicilio acompañados de la Policía, que procedió a su detención. Hernández fue en un primer momento detenido, acusado de homicidio.

 

Horas más tarde, la Justicia de España resolvió dejarlo en libertad sin medidas cautelares. Según informó la agencia EFE, Hernández fue liberado tras comparecer ante el juez, a quien reconoció haber colaborado con el deseo de su pareja de poner fin a su vida. El hombre seguirá siendo investigado por el delito de cooperación al suicidio.

 

Un acto de amor

 

En las imágenes grabadas Hernández le pregunta a su mujer si está dispuesta a morir, a lo que ella responde afirmativamente con la cabeza. «María José ha llegado el momento que tanto deseabas. Yo te voy a prestar mis manos», le dice el hombre en ese momento.

 

Mientras le ofrece el vaso con la sustancia le habla: «Te lo doy. Tienes que soportarlo. ¿Estás decidida? Ahí tienes. A ver dame la mano que quiero notar la ausencia definitiva de tu sufrimiento».

 

Desde que le diagnosticaron la enfermedad con 32 años, María José Carrasco había estado al cuidado de su esposo, quien le tenía que suministrar diariamente morfina para aliviar sus dolores, de manera que su existencia se basaba en estar sedada la mayor parte del tiempo. Ya no podía moverse, ni hablar.

 

En las redes sociales la ciudadanía ha reaccionado masivamente y la mayoría califican lo ocurrido como el mayor «acto de amor».

 

El hashtag #eutanasia ha sido trending topic toda la mañana en España, dando visibilidad a un tema que ha ocupado numerosos debates en los últimos años en el país.

 

La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, se ha querido pronunciar al respecto afirmando que en su partido quieren «que las personas no sufran más allá de lo que decidan con su propia libertad» y recordando que la propuesta legislativa del partido socialista sobre la muerte digna no pudo avanzar debido al bloqueo de la Mesa del Congreso de los Diputados, donde el Partido Popular y Ciudadanos tienen mayoría.

 

De hecho, a los pocos días de convocar los comicios generales, el propio presidente del Gobierno aseguraba que con «una nueva mayoría parlamentaria del Partido Socialista» reconocerán el «derecho a la eutanasia y a una muerte digna».

 

(RT)