El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, anunció el 6 de abril sanciones a 34 embarcaciones operadas o propiedad de la petrolera venezolana PDVSA y a dos compañías y una embarcación que entregaron petróleo a Cuba en febrero y marzo.

 

Desde La Habana, Pedro Martínez, subdirector general de Radio Habana Cuba, dijo a Sputnik el anuncio de Pence es una agresión más a la isla y una violación adicional al derecho internacional.

 

Según contó Martínez, el envío de petróleo al Gobierno de Díaz-Canel está respaldado en convenios entre ambos países desde hace años, «y por supuesto es positivo para venezolanos y cubanos».

 

En octubre de 2000, los expresidentes y líderes políticos Fidel Castro y Hugo Chávez firmaron un Convenio Integral de Cooperación que estipuló por la parte cubana el apoyo y cooperación con servicios y programas sociales al desarrollo social de los venezolanos.

 

A cambio, Caracas proveería a su par de petróleo, siempre según los precios del mercado mundial, de acuerdo con el sitio de la embajada de Cuba en Venezuela. Así, médicos, pedagogos y otros profesionales cubanos aportaron su trabajo y conocimiento en misiones sanitarias y educativas, entre otras, para saldar el precio del combustible intercambiado.

 

Desde entonces, el convenio se actualiza cada año, cuando se precisa el monto monetario por el valor de los servicios y las especificaciones, regulaciones y modalidades en que serán entregados.

 

Sin embargo, para EEUU el petróleo venezolano es uno de los pretextos para afectar a estas dos naciones, un interés más que claro en la actual coyuntura. Por ejemplo, según Nicolás Maduro, los ataques a la red eléctrica de Venezuela fueron lanzados desde Houston y otras ciudades de países aliados. Por otro lado, la limitación del comercio de hidrocarburos entre los dos socios estratégicos vuelve a poner todo el peso del país norteamericano sobre los cubanos.

 

Martínez explicó cómo las sanciones anunciadas por Pence «no son una novedad» en el panorama de bloqueo que vive Cuba desde hace más de 50 años, el cerco comercial más largo en la historia de la humanidad.

 

Además mencionó que «son reflejo de la impotencia de EEUU que no ha podido impedir la presencia de Cuba, de Rusia, ni de China en Venezuela, además del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador [en México], que tampoco se ha prestado a viabilizar la agresión contra los venezolanos», destacó.

 

También indicó que forman parte de la carrera hacia las elecciones presidenciales de EEUU en 2020, que tiene en función a toda la Casa Blanca tratando de ganar méritos entre los votantes de Florida para reelección del presidente Donald Trump, «pero Cuba es un hueso duro de roer», sentenció Martínez.

 

(sputniknews.com)