Francia vive desde el 17 de noviembre del 2018 una oleada de movilizaciones de los llamados ‘chalecos amarillos’, el movimiento que mantiene contra las cuerdas al presidente del país, Emmanuel Macron.

 

Los manifestantes, que visten chalecos fluorescentes, protestaban en un principio por el alza en los precios de los combustibles y los impuestos, pero luego sus reivindicaciones se extendieron a otras demandas sociales y políticas, e incluso exigen incluso la dimisión del líder galo.

 

(Sputnik)