Una revista alemana alerta de la escalada de tensiones Irán-EEUU y predice que el presidente estadounidense, Donald Trump, será el único perdedor de este juego.

 

Der Spiegel se refiere en un artículo difundido este miércoles a las hostilidades de Trump contra Irán, y advierte de que el inquilino de la Casa Blanca será el único perdedor de este peligroso juego.

 

El presidente de Irán, Hasan Rohani, ha informado también hoy miércoles de que Teherán va a dejar de cumplir dos de los puntos del acuerdo nuclear de 2015: no exportará su uranio de bajo enriquecimiento (LEU, por sus siglas en inglés) ni su agua pesada durante los próximos 60 días, plazo en el cual ha invitado a sus socios europeos a dialogar, señala la publicación hamburguesa.

 

La revista recuerda las intimidaciones lanzadas por Washington aprovechando un desplazamiento rutinario en el mar Mediterráneo del grupo de ataque del portaviones nuclear USS Abraham Lincoln, junto a una unidad de bombarderos.

 

Estas amenazas suponen un gran peligro, en particular, para EEUU, agrega Der Spiegel, antes de destacar el alto grado de preparación de las tropas iraníes, en especial del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI).

 

Las autoridades iraníes han asegurado que están preparadas para hacer frente a las amenazas, además de advertir de que abrir una confrontación militar con la República Islámica de Irán sería un “acto suicida”.

 

Por otro lado, la revista subraya que los iraníes no se arrodillarán ante los embargos y presiones de Washington, sino que, por el contrario, las hostilidades de EEUU hacen que el pueblo iraní apoye más a su Gobierno.

 

El 8 de mayo de 2018, la Administración gringa se retiró unilateralmente por decisión de su presidente, Donald Trump, del acuerdo multinacional sobre el programa de energía nuclear iraní, tras lo cual restauró todos los embargos que se habían levantado en virtud del pacto. Un año después, Irán ha decidido reducir su nivel de compromiso con el mismo.

 

A pesar de que EEUU y los países europeos implicados han hablado, tanto antes como después de la firma del acuerdo, de una supuesta amenaza del programa nuclear persa a la paz y la seguridad mundiales, ellos mismos saben que las actividades nucleares de la República Islámica son de carácter pacífico y que tales afirmaciones son solo exageraciones de tipo político.

 

(HispanTV)