Cuando Paraguaná, tierra falconiana escuchó un grito protestarío ese 31 de octubre de 1941, no advertía que sería Ely Rafael Primera Rosell, conocido como hoy como Alí Primera quien llevaría el nombre de esta ciudad madre por toda Venezuela.
Alí Primera, quien llega a 32 años de su siembra este jueves 16 de febrero, expresó en sus canciones un sentir y una lucha por los más desprotegidos de Venezuela y Latinoamérica.
Con su tonada inconfundible se convirtió en el activista político venezolano más representativo de la década de los 70 y 80, en pleno puntofijismo donde los gobiernos de la cuarta república atentaban contra los valores y la libertad del pueblo.
“Yo sé que un día tuviste sueños, no viste un rio cuando pequeño pero tu alma se te alegraba con la llegada del vendaval”, pregonaba en plazas, universidades, en comunidades, donde el pueblo esperaba el cantar de sus crónicas sociales.
Su partido político fue su voz, su militancia fue el canto, su ideología fue la defensa del pueblo, su religión fue el amor.
De las tierras áridas de Falcón es el origen del Cantor del Pueblo venezolano. Su padre Antonio Primera y su Carmen Adela Rossell, lo apodaron “Alí”, porque sus abuelos eran árabes y familiarmente lo llamaban por ese diminutivo.
Al quedar huérfano de padre a los tres años, comienza un peregrinar con su madre por diversos pueblos de la Península de Paraguaná que incluyeron San José, Caja de Agua, Las Piedras y -finalmente- el Barrio La Vela, hoy conocido como sector Alí Primera en el municipio Los Taques, cerca de Punto Fijo.
Las precarias condiciones socioeconómicas de su familia lo obligan a desempeñarse como limpiabotas -a los seis años- hasta boxeador, mientras culminaba sus estudios y en 1960 se radica en la capital del país, donde continúa su formación educativa en el Liceo Caracas y posteriormente, ingresa a la Universidad Central de Venezuela.
Fue en los pasillos de la llamada “casa que vence las sombras”, cuando inicia su trayectoria musical y poética, y protagoniza numerosos conciertos en los jardines y cafetines, para luego participar en 1967, en el Festival de la Canción de Protesta organizado por la Universidad de Los Andes (ULA).
Entre 1969 y 1973, continua sus estudios universitarios en Europa al ganar una beca estudiantil beca que le otorga el Partido Comunista de Venezuela (PCV) para continuar sus estudios en Rumanía en Tecnología del Petróleo y durante su permanencia en Alemania graba su primer disco titulado “Gente de Mi Tierra”, cuyas composiciones recogen el sufrimiento de un pueblo sometido a la pobreza y a la injusticia social, reseñan diversas publicaciones sobre la vida del cantautor.
Se casó con Sol Musset, a quien conoció en una de las ediciones de la Voz Liceísta en la ciudad de Barquisimeto, estado Lara, con quien procreó cuatro hijos: Sandino, Servando, Florentino y Juan Simón.
Para 1973, el nombre de Alí Primera ya era identificado como el Cantor del Pueblo, y los sectores más empobrecidos de Venezuela que conocen sus canciones, le dan la popularidad que la discografía comercial no le otorgó, ya que fue vetado por los medios de comunicación y los gobiernos adeco-copeyanos por su canto de protesta.
Políticamente militó en la Juventud Comunista de Venezuela (JCV) y en el Partido Comunista de Venezuela (PCV), además del denominado Movimiento al Socialismo (MAS), acompañando y trabajando durante la primera campaña electoral de José Vicente Rangel.
Fue fundador del sello disquero Cigarrón para difundir sus composiciones y se apoyó para la distribución de su discografía con la empresa Producciones Musicales (Promus).
Desde esa época hasta su muerte el 16 de febrero de 1985, grabó 13 producciones y participó en numerosos festivales musicales del canto popular en toda América Latina. A su canto lo llamaba la Canción Necesaria, y su estilo estaba dentro del canto de protesta, expresión del pensamiento, la lucha contra al sistema capitalista y el amor a la venezolanidad.
En su repertorio se cuenta: Canción mansa para un pueblo bravo, Techos de cartón, Yo no sé filosofar, Tín Marín, Canción en dolor mayor, la Patria es el hombre, No basta rezar, entre otras composiciones.
El fallecimiento del padre cantor se produjo un 16 de febrero de 1985, en un accidente automovilístico, ocurrido en la autopista Valle-Coche, luego de salir de una sesión de grabación.
Múltiples han sido los homenajes póstumos que se han realizado para honrar a Alí Primera, pero uno de los principales fue en 2005 cuando el Gobierno Revolucionario -por iniciativa del Comandante Hugo Chávez Frías- se decretó su música como Patrimonio Cultural Nacional.
