La exprimera ministra británica secuestró 1.200 toneladas de oro de Venezuela. El de Theresa May fue de los primeros gobiernos en reconocer al autoproclamado. La expremier May recibió y se retrató en 2017 con Borges y otros representantes de la derecha pavosa.

 

La May declaró hace dos años: “Hemos sido consistentes en nuestra condena a las acciones del gobierno de Nicolás Maduro». En su obsesión contra Venezuela, la primera ministra se secó hasta el cogollo.

Ayer renunció, mustia.

 

(Earle Herrera / [email protected])