El embajador de Nigeria ante la ONU, Tijjani Muhammad-Bande, es electo presidente de la Asamblea General de la ONU, debido a que este año le corresponde ocupar el puesto a un representante del Grupo Africano, de acuerdo con la rotación establecida en el seno del organismo multilateral.

 

El diplomático nigeriano anunció el pasado 13 de mayo que quiere priorizar en su presidencia el establecimiento de alianzas de cara a abordar los preocupantes  problemas globales.

 

El cambio climático, el calentamiento del planeta, el terrorismo, las pandemias mundiales, la pobreza, el hambre, el analfabetismo, las desigualdades y la amenaza nuclear estuvieron entre los desafíos mencionados por el  representante de Nigeria.

 

A juicio de Muhammad-Bande, el cambio climático y el terrorismo son asuntos que la Asamblea General debe seguir atendiendo y dar prioridad, así como lo referido a la paz y la seguridad.

 

También se refirió al  tema de las armas nucleares y de exterminio en masa, e insistió en que solo la acción colectiva puede ayudar a resolver tales problemas.

 

Muhammad-Bande sucederá en el cargo a la actual presidenta de la Asamblea General de la ONU, María Fernanda Espinosa, la cuarta mujer que ha ejercido esa responsabilidad.

 

(teleSUR)