El presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo chino, Xi Jinping, visitaron un recinto donde habitan osos pandas tras su reunión de este miércoles en Moscú, Rusia. 

Ambos líderes abordaron la situación en Venezuela, el futuro del acuerdo nuclear con Irán, sus relaciones con EE.UU. y la desnuclearización de la península coreana. 

Rusia y China se oponen a una intervención militar en Venezuela y abogan por una solución pacífica de la situación en el país suramericano, según la declaración final de la reunión. 

Los dos países tienen la intención de «seguir de cerca la situación en Venezuela, llamar a todas las partes a que cumplan con la Carta de la ONU, las normas de derecho internacional y las relaciones intergubernamentales, adherirse al principio de no injerencia en los asuntos internos de otros Estados, promover la resolución pacífica de problemas en este país a través de un diálogo político inclusivo y oponerse a la intervención militar en Venezuela», dice el documento.

 

(RT)