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Ante la activación del plan 700, con el despliegue de casi 4 mil funcionarios entre FANB, Sunagro, Sundde y PNB, con la finalidad de combatir las mafias asociadas al pan, 21 panaderías permanecieron cerradas en la ciudad de Caracas aparentemente para evadir rendir cuentas a las autoridades.

 

En ese sentido, el superintendente de Precios Justos, William Contreras tras afirmar que se está buscando la defensa de los intereses del pueblo develó algunas claves sobre las medidas a tomar:

 

1. «Debemos erradicar el condicionamiento y discriminación en la venta del pan», dijo Contreras a propósito de algunos establecimientos que arman «combos» para condicionar el acceso del pueblo a u rubro de consumo masivo.

 

2. El 90% de la materia prima -que provee el Estado venezolano- debe destinarse a las canillas y al pan francés, los de mayor consumo para el pueblo venezolano.

 

3. William Contreras fue categórico: «Incluso los funcionarios encargados de las zonas en las que hayan panaderías con colas, serán sancionados».

 

(LaIguana.TV)