El ayuntamiento de la ciudad de Berkeley, ubicada en el condado de Alameda, estado de California, pidió al presidente Donald Trump retirar las sanciones financieras que ha impuesto a Venezuela y que han generado un deterioro en la calidad de vida del pueblo.
Así quedó reseñado en una resolución emitida recientemente por este órgano gubernamental, que harán llegar a las congresista Barbara Lee, Nancy Pelosi, Dianne Feinstein y Kamala Harris, así como al propio Trump y al Secretario de Estado Mike Pompeo.
En dicho texto se señala “que los funcionarios de la administración de Trump declararon abiertamente su intención de intervenir militarmente en el gobierno de Venezuela, instaron a los militares venezolanos a derrocar al gobierno y vetaron cualquier posibilidad de diálogo a pesar de los esfuerzos de los gobiernos de Venezuela, México y Uruguay , y el papa Francisco”.
Más adelante se expresa que las medidas implementadas por el régimen gringo contra la nación, que incluyen la confiscación de dinero y propiedades petroleras, “aumentan las dificultades para los venezolanos impidiéndoles el acceso a alimentos y medicamentos importados, mientras que buscan hipócritamente promover una confrontación militar forzando camiones cargados de ayuda a través de las fronteras de Brasil y Colombia”.
Dicha resolución plantea además lo que ha sido la política de esa nación norteamericana durante años, de intervenir en los asuntos internos de las naciones.
“Los Estados Unidos históricamente han usado su poder económico para desestabilizar a los países de mentalidad independiente, el más famoso de Chile a principios de la década de 1970, haciendo que la economía ‘gritara’, así como Nicaragua en la década de 1980, para luego utilizar la economía de los pueblos, la miseria como pretexto para la intervención militar”.
Recuerda así mismo que “la campaña estadounidense de cambio de régimen en Venezuela viola el derecho internacional, en contra de los intereses del pueblo de Venezuela y del pueblo de los Estados Unidos”.
(LaIguana.TV)
