El avión de transporte pesado C-5M Super Galaxy acaparó todas las miradas de los espectadores de la exhibición aérea AirVenture en Estados Unidos, donde su tren de aterrizaje se incendió al tocar tierra.

 

Según los testigos, la gigantesca aeronave efectuó un aterrizaje normal y sin percances aparentes en el aeródromo de Oshkosh. No obstante, uno de sus principales trenes de aterrizaje empezó a echar humo.

 

Luego, mientras el Super Galaxy estaba rodando por el aeródromo, el humo se convirtió en fuego. Afortunadamente, nadie resultó herido en el incidente y los daños materiales fueron mínimos, puesto que un vehículo de bomberos no tardó en extinguir el fuego.

 

El intrincado sistema de trenes de aterrizaje del C-5M Super Galaxy es objeto de orgullo de los diseñadores de aviones estadounidenses. Sin embargo, esta no es la primera vez que las aeronaves de este modelo protagonizan accidentes por culpa de los problemas crónicos del tren de aterrizaje.

 

De los 12 accidentes que sufrieron estas aeronaves desde su introducción en las Fuerzas Armadas de EEUU, cinco ocurrieron a causa de problemas con el tren de aterrizaje.

 

Así, el primer accidente ocurrió en 1986 en Alemania y otro accidente fue captado en vídeo en 2001, cuando un C-5 Galaxy tuvo que aterrizar ‘sobre la panza’ en un lago seco.

 

Más recientemente, tuvo lugar un accidente en la base aérea de Rota, en la provincia española de Cádiz, donde un C-5 Galaxy tuvo que aterrizar sin el tren de aterrizaje delantero. Un incidente similar ocurrió y fue grabado en vídeo en 2018, cuando uno de estos aviones de transporte no pudo extender su tren de aterrizaje delantero y se vio obligado a tocar tierra del mismo modo que ocurrió en ocasiones previas. 

 

(Sputnik)