El asesor de seguridad de la Casa Blanca, John Bolton, aseguró este martes en una reunión del autodenominado «Grupo de Lima» -integrado por gobiernos de derecha aliados a los propósitos de Estados Unidos contra Venezuela- que «el tiempo del diálogo» en Venezuela «ha terminado» y que «ahora es el momento para la acción».
Las palabras de Bolton, citado por RT, son en referencia a la orden ejecutiva que firmó este lunes en la tarde el presidente de su país, Donald Trump, que permite la congelación todos los activos de Venezuela y prohíbe las transacciones del Gobierno venezolano con empresas y personas naturales de ese país, una medida que busca asfixiar aún más a la población venezolana con la intención de sacar violentamente al presidente Nicolás Maduro.
La medida, que entró en vigor de inmediato, establece que «todos los bienes e intereses en propiedad del Gobierno de Venezuela que se encuentran en Estados Unidos (valorados por al menos 30.000 millones de dólares) están bloqueados y no pueden ser transferidos, pagados, exportados, retirados ni tratados de otra manera».
De acuerdo a Bolton, la orden ejecutiva también «autoriza sanciones a las personas extranjeras que brinden apoyo, bienes o servicios a cualquier persona sancionada, incluido el gobierno de Venezuela».
Negar «a Maduro» el acceso al sistema financiero global
Agrega Bolton que Washington está «enviando una señal a terceros que desean hacer negocios con el régimen de Maduro», para que procedan con «extrema precaución», pues «no hay necesidad de arriesgar sus intereses comerciales con Estados Unidos con el fin de beneficiarse de un régimen corrupto y moribundo».
«Estamos dando este paso para negarle a Maduro el acceso al sistema financiero global y para aislarlo aún más internacionalmente», precisó Bolton, al tratar de personalizar la medida que finalmente afecta las transacciones del Estado venezolano en pleno y por ende afecta a la población indistintamente su ideología y posición política.
Según Bolton, Trump decidió tomar la medida porque «funcionó en Panamá» y «lo hará en Venezuela». Recordó como antecedentes los casos de «congelamiento de activos contra el gobierno de [Manuel] Noriega en Panamá en 1988, un embargo comercial a Nicaragua en 1985, o el congelamiento integral de activos y el embargo comercial a Cuba en 1962».
Señaló que en cada uno de estos casos, Estados Unidos utilizó «una herramienta económica robusta contra las dictaduras que estaban destruyendo sus países con corrupción, violencia y represión».
Que Venezuela «se quede sin medios para mantenerse financieramente»
Bolton también atacó a Rusia y China al calificar que su apoyo a Venezuela es «intolerable».
Más temprano, en declaraciones a la cadena televisiva Fox, Bolton calificó a Venezuela como «un estado canalla» y lo comparó con Irán, Corea del Norte y Siria, todos «enemigos» de Washington.
Aseguró que su país hará lo que sea necesario para «garantizar que Maduro» (Venezuela) «se quede sin medios para mantenerse financieramente» y dijo que las nuevas «sanciones» unilaterales contra el país van «mucho más allá de todo lo que hemos hecho antes».
«Creo que el aislamiento del régimen está aumentando. Creo que el pueblo de Venezuela necesita que este régimen sea removido y el legítimo gobierno de la Asamblea Nacional debe tomar el poder y celebrar nuevas elecciones», dijo Bolton en alución al parlamento en desacato al orden constitucional desde enero de 2016 que insiste en instalar un Estado paralelo encabezado por el grupo sedicioso de extrema derecha relacionado a Voluntad Popular y la figura de Juan Guaidó.
(LaIguana.TV)
