Los ministros de exteriores de Rusia e Irán y el canciller de Siria se reunieron en Moscú este viernes para exigir a EEUU a no seguir bombardeando el territorio sirio y solicitaron se investigue el ataque químico de la semana pasada.
El ministro ruso, Sergey Lavrov, dijo que el ataque estadounidense de la semana pasada fue una «violación flagrante» a la ley internacional y advirtió que más acciones semejantes implicarían «graves consecuencias para la seguridad global». Asimismo, el ministro iraní Javad Zarif advirtió que cualquier acción unilateral por parte de EEUU es inaceptable.
Ataque sin autoría
EEUU acusa al régimen sirio de lanzar el ataque químico en Khan Sheikhoun que dejó al menos 80 muertos el cuatro de abril y respondió bombardeando una base aérea siria.
Moscú asegura que las víctimas murieron por agentes tóxicos liberados de un arsenal químico de los rebeldes y recomendó no culpar a Damasco hasta que se realice una investigación independiente.
En tal sentido, Lavrov acusó a EEUU y sus aliados de tratar de opacar una investigación internacional sobre el ataque y manifestó su escepticismo sobre una indagación preliminar realizada por el supervisor de armas químicas de la ONU.
«Si nuestros colegas estadounidenses y algunas naciones europeas creen que su versión es la correcta, no tienen razón en temer por la creación de un grupo independiente”.
