Este domingo 25 de agosto, el economista y presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, esbozó en su acostumbrado artículo dominical algunos aspectos del panorama de negociaciones políticas que se han dado en Venezuela en la última semana.

 

León descartó referirse a los avances de negociaciones facilitadas por Noruega, que se pausaron luego de las nuevas sanciones de Estados Unidos contra Venezuela, sino que se enfocó en el análisis de negociaciones secretas. En ese sentido, sostuvo que estas pueden ser consentidas o no por los distintos bandos y que, según él, tienen el objetivo de ir más allá de panoramas electorales y abarcan “casi cualquier escenario”.

 

El economista resaltó las declaraciones hechas tanto por Estados Unidos como Venezuela, donde salió a luz pública las negociaciones que han tenido el Gobierno de Trump con figuras claves del Gobierno Bolivariano sin consentimiento de Maduro,  mientras el presidente de Venezuela ha dicho que miembros de su gabinete se han reunido con Estados Unidos para buscar soluciones al complejo panorama existente.

 

Para León, surge una incógnita ante este hecho en el que, por un lado hay anuncios de negociaciones por todos lados, mientras que en paralelo, surgen posiciones radicales que buscan presionar y mandar mensajes de fuerza y amenazas para “evitar cualquier resquebrajamiento interno de su fuerza”. 

 

El economista opositor, ante esta situación, resaltó que las cabezas principales en este conflicto están reconociendo su disposición para subsanar la disputa y que esto pone a los voceros más radicales en una postura al margen de esa realidad concreta y asomada por los verdaderos líderes.

 

“Más allá de las consignas principistas de los voceros radicales de ambos lados, que hoy quedan colgados de la brocha con las declaraciones negociadoras de sus propios aliados (a quienes paradójicamente no se atreven a criticar en sus tuits), resulta claro que todo es negociable. En efecto, la política es la ciencia de la negociación”, subrayó.

 

Según él, el Gobierno no busca negociar sino ganar tiempo, sin aclarar para qué, mientras que la oposición sólo busca sacar a Maduro del poder y ante ese nuevo escenario se ven, nuevamente, obligados a negociar para lograr sus objetivos respectivos, por lo que afirma que la solución de todo este conflicto será negociada.

 

(LaIguana.TV)