La policía de la ciudad de Buenos Aires detuvo a cuatro manifestantes  mientras usó gases lacrimógenos en una jornada que derivó en una fuerte represión policial en contra de la protesta contra el hambre en el país.

 

El enfrentamiento comenzó cuando un grupo de manifestantes intentó cruzar la 9 de Julio por Moreno, en dirección a Bernardo de Irigoyen. Desde antes los manifestantes realizaron ollas populares con el propósito de pedir un refuerzo en las partidas de alimentos para comedores comunitarios.

 

Además, exigen un aumento del 50 por ciento en los programas sociales y la ampliación de estos. Asimismo, reclaman la Ley de Emergencia Alimentaria que se debatirá mañana en el Congreso.

 

«Nos reprimieron», denunció Eduardo Beliboni, uno de los dirigentes del Polo Obrero, en declaraciones a la prensa desde el lugar.

 

El dirigente afirmó que hirieron a seis manifestantes después que avanzaran sobre ellos para desalojarlos del Ministerio de Desarrollo Social. Lugar donde las organizaciones sociales convocaron la protesta por 48 horas en espera de la sesión especial del Congreso en la que se tratará la Ley de Emergencia Alimentaria.

 

Belliboni pidió al gobierno que abra una mesa de diálogo y frene la represión. «¿Dónde está la gente encapuchada y con palos? ¡Están ahí en frente y son los policías!», denunció el dirigente social para descartar que la represión hubiese sido provocada por los movimientos sociales.

 

Por su parte, la ministra de Desarrollo Social de la Nación Carolina Stanley calificó como extorsión la  protesta. «He sido siempre abierta al diálogo. Diferencio la postura de diferentes actores sociales. Tenemos una ley de Emergencia Social donde se prorrogó la Ley de Emergencia Alimentaria», argumentó.

 

El presidente Mauricio Macri anunció, momento antes, que habilitará la discusión de este proyecto de ley durante la sesión extraordinaria convocada para este jueves en el Congreso entre distintas fuerzas de oposición.

 

Mientras tanto, los movimientos sociales instalarán el campamento por 48 horas a las afueras del edificio de Desarrollo Social, a la espera de una desición del Congreso y para insistir en el diálogo con la ministra Carolina Stanley.

 

(teleSUR)