Cuatro cámaras de seguridad del hospedaje Señor de Sipán, ubicado en el distrito peruano de San Martín de Porres, registraron el momento en el que los implicados del asesinato y descuartizamiento de un venezolano y un peruano, metieron en la maleta de un taxi unas bolsas con los restos de los hombres.
A partir de las grabaciones, que habían sido borradas por uno de los implicados, los agentes peruanos han constatado que al menos cinco personas, entre ellos tres hombres y dos mujeres, estarían implicados en el asesinato del venezolano Rubén Matamoros y del peruano Jafet Torrico.
“Hemos recuperado imágenes de la matriz de la cámara de seguridad, donde podemos ver que estas personas, el día 8 y 9 de setiembre, transitan en el interior del hostal y cargan estas bolsas”, informó Danny Humpire, jefe de peritajes del Ministerio Público de Perú.
Además, Humpire agregó: En total fueron 198 vistas del día 8 y 9 de setiembre captadas por cuatro cámaras de video ubicadas en el primer y segundo piso”.
El viernes 13 de septiembre, el taxista Raúl Felipe Bodero Cerna, quien trasladó a los presuntos asesinos para deshacerse de los restos de sus víctimas, recreó la ruta que tomaron por distintas vías de Lima.
Pese a que la Fiscalía solicitó la detención del taxista, el juez a cargo de tutelar la investigación lo dejó en libertad, por considerar que no hay pruebas de que el chofer supiera del contenido de las bolsas que trasladaban los presuntos asesinos.
Por otra parte, una mujer venezolana, identificada como Verónica Montoya, fue detenida en la madrugada del sábado 14 de septiembre por su presunta relación con el doble asesinato.
Montoya fue aprehendida después que la Policía Nacional del Perú revisara las cámaras de seguridad del hostal, donde se observa a los implicados sacando los restos de las víctimas.
(LaIguana.TV)
