El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, expresó su condena a los recientes ataques con drones contra las refinerías de Saudi Aramco en el este de Arabia Saudita, se desprende de una declaración del portavoz del secretario general, Stéphane Dujarric.

 

«El secretario general condena los ataques del sábado contra las instalaciones petroleras de Aramco en la provincia oriental en el Reino de Arabia Saudita», dice la declaración.

 

Según el documento, la ONU exhorta a todas las partes del conflicto a que actúen con la máxima moderación, eviten toda escalada de tensiones y cumplan con el derecho internacional humanitario.

 

En la madrugada del 14 de septiembre una serie de ataques con drones provocó incendios en dos refinerías de la compañía Saudi Aramco en los distritos de Abqaiq y Khurais, en el este de Arabia Saudita.

 

La compañía reconoció que el incidente redujo su producción diaria de unos 5,7 millones de barriles, casi a la mitad.

 

Los rebeldes hutíes reivindicaron la autoría de los ataques y advirtieron que seguirán atacando el territorio de Arabia Saudita hasta que el reino cese acciones de combate en Yemen.

 

El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, acusó a Irán de estar detrás de los ataques en Abqaiq y Khurai y otro centenar de ataques contra Arabia Saudita.

 

Irán rechazó en términos contundentes la acusación, al subrayar que EE.UU. busca destruir su reputación y allanar el camino para futuras sanciones.

 

Para el Ministerio de Exteriores iraní, EE.UU. recurre a la táctica del máximo engaño habiendo fracasado con su política de máxima presión.

 

Yemen vive desde 2014 un conflicto armado entre los partidarios del presidente legítimo, Abdo Rabu Mansur Hadi, y los rebeldes chiíes del movimiento Ansar Alá (hutíes).

 

En marzo de 2015 intervino en el conflicto, del lado de Hadi, una coalición militar suní encabezada por Arabia Saudita, que incluye a los Emiratos Árabes Unidos y a otros países árabes.

 

(Sputnik)