En su programa Desde donde sea, el filósofo y comunicador Miguel Ángel Pérez Pirela hizo un detallado recuento de las bochornosas revelaciones de los últimos días sobre las relaciones del autoproclamado Juan Guaidó con grupos de narcoparamilitares colombianos, inventario que concluyó con una reflexión: “si ya tiene abiertas seis investigaciones penales por parte del Ministerio Público, ¿qué otra prueba se necesita para que esté tras las rejas?”.

 

En el espacio de opinión y análisis que se transmite por plataformas digitales, Pérez Pirela comenzó señalando que el escándalo en el que está envuelto el presidente de la Asamblea Nacional es de dimensiones estratosféricas, tras haber aparecido fotografiado con dos de los miembros más notorios del grupo narcoparamilitar los Rastrojos, que siembra el terror en la frontera colombo-venezolana.

 

A su juicio, esa polémica, en lugar de remitir, pica y se extiende, entre otras razones porque las explicaciones dadas por el implicado han sido insuficientes. “Cuando uno sale en fotos con gente que pica seres humanos y luego los lleva a un crematorio, como hacía Hitler, una mínima explicación es necesaria y no ha sido el caso”, sentenció.

 

“Pero en verdad que el escándalo pica y se extiende porque en las últimas horas se ha producido otro bombazo: nuevas fotos con más paramilitares, pero ahora en una camioneta. No sirve ya la excusa de que iba pasando y por casualidad me encontré con unos narcoparamilitares. En una de estas nuevas gráficas sale con Jhonatan Zambrano García, alias ‘Patrón Pobre’, encargado de Finanzas de los Rastrojos. Aparece en la camioneta que este hombre maneja –explicó-. Surgen varias preguntas: ¿qué hacía Guaidó en la camioneta de este miembro notorio de los Rastrojos? ¿Qué vinculación tienen los Rastrojos con Iván Duque porque este grupo traslada a Guaidó a través de las trochas y luego lo dejan en un sitio donde es recibido por autoridades de Colombia y un montón de escoltas, con alfombra roja y todo? ¿Cómo es que se instauró un toque de queda paramilitar en la zona? ¿Cuáles son los enlaces que existen entre Voluntad Popular y el paramilitarismo colombiano?”

 

Señaló Pérez Pirela que muchas de esas respuestas debe darlas el gobierno colombiano, pero hasta ahora, la única que ha pronunciado Duque es que “Guaidó es un titán”.

 

Del lado de Guaidó tampoco ha habido explicaciones convincentes. “¿Cómo es que alguien que dice ser presidente y anda escoltado por un grupo de seguridad se toma tranquilamente una foto con alguien armado? Ese cuento no se lo cree nadie”.

 

Subrayando el hecho de que el caso crece sin parar, hizo referencia a informaciones procedentes de medios y de políticos colombianos que hablan de una emboscada contra uno de los personajes que se fotografió con Guaidó, Jhon Jairo Durán Contreras, alias “el Menor”, y que, en vista de que este logró huir, derivó en el asesinato de cuatro de sus familiares. “Hay más preguntas que respuestas. Parecen ser retaliaciones. Esto está ardiendo allá en Colombia. El ex candidato presidencial Gustavo Petro habló de una masacre en Cúcuta y dice que intentan silenciar a los protagonistas y testigos del paso del autoproclamado por la zona. No es un simple escándalo político: es una situación gravísima”.

 

Comentó también informaciones dadas por Wilfredo Cañizares, de la ONG colombiana defensora de derechos humanos Progresar, autor de la denuncia original, quien ha insistido en que la zona por la que cruzó Guaidó la frontera en febrero pasado está bajo control de los Rastrojos. Citó el caso del joven Camilo Andrés Pineda García, que fue raptado por esta organización narcoparamilitar en la misma cancha donde fue recibido Guaidó con alfombra roja por el gobierno de Duque.

 

“Medios colombianos hicieron el recorrido que supuestamente hizo Guaidó. Es escalofriante porque se trata de la misma ruta que usan los Rastrojos para sacar la cocaína. El que no lo quiera ver, que no lo vea. El que quiera hacer como los gatos, que esconden sus necesidades fisiológicas debajo de la tierra, que lo haga, pero la mierda siempre huele a mierda”, expresó Pérez Pirela, tras recibir el mensaje de un usuario que le exigió presentar pruebas de sus señalamientos.

 

Indicó que el escándalo está teniendo también resultados diplomáticos, como la no inclusión de Guaidó en la agenda de reuniones del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres. “Él mismo Guterres dijo que no figura en su agenda una reunión con Guaidó. Así se cae aquel mamotreto comunicacional según la cual él sería el representante de la República Bolivariana de Venezuela en la Asamblea de la ONU. Los representante serán la vicepresidenta Delcy Rodríguez y el canciller Jorge Arreaza”.

 

Pérez Pirela también cuestionó la actitud de la prensa bogotana ante el caso. “La presión es tal que El Espectador de Colombia, luego de que publicó las gráficas con el título de ‘las incómodas fotos de Juan Guaidó con paramilitares’, se comió sus palabras, diciendo que no debieron calificar algo sobre lo que se está informando… Pero, yo pregunto ¿cuántos adjetivos se han utilizado para calificar al gobierno venezolano?”.

 

En contraposición de ese tipo de actitud de un importante medio de comunicación colombiano, invitó a leer un trabajo de la BBC británica, que muestra un mínimo de moralidad y ética al informar cómo los grupos armados y las mafias se aprovechan de los migrantes venezolanos en Colombia.

 

El Tiar y la desfachatez colombiana

 

Un segundo tema del programa, aunque muy relacionado con el anterior, fue la amenaza de una acción militar contra Venezuela, ahora coordinada a través del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (Tiar), que fue invocado por Colombia y por los opositores radicales venezolanos.

 

“Continúan las graves tensiones entre el gobierno de Estados Unidos con Venezuela, un escenario en el que actúan como mediadores o títeres los que gobiernan Colombia. Se detectó un avión espía colombiano a la altura de La Guajira. Se activó la Defensa Aérea venezolana. Al percatarse de la aproximación de los Sukhoi, la nave volvió al espacio aéreo colombiano. Es una provocación más. No debemos caer en esas provocaciones. Colombia es un país en guerra permanente y que vive de ella. Todos los vicios que puede tener una sociedad, los tiene Colombia. El nuestro, en cambio es un país de paz: no tenemos tradición de asesinar gente, ni de abrirle la barriga y meterle la cabeza dentro”.

 

Fustigó especialmente al canciller colombiano Carlos Holmes Trujillo, quien solicitó la activación del Tiar y ha anunciado que su país prepara unas denuncias gravísimas contra Venezuela por vínculos con organizaciones narcoterroristas. “¿Será posible que vayan con su cara bien lavada pedir esto? Estamos llegando a nivel de desfachatez que ni siquiera en tiempos de Santander. ¡Colombia acusa a Venezuela de narcoparamilitarismo! ¿Qué es esto, Dios mío santo? –exclamó-. Es el mismo gobierno que trata de hacer un silencio sepulcral sobre los 155 líderes sociales asesinados solo en 2019 según un instituto de investigación de Colombia. ¿Qué pasaría si fuera en Venezuela? Entrarían los casos azules, verdes, rosados… Esto es el mundo patas arriba”.

 

Respecto al Tiar dijo que es necesario reflexionar al respecto e investigar en la forma como ha sido utilizado o dejado de utilizar. “Nosotros escudriñamos y nos dimos cuenta de muchas cosas preocupantes. Se le aplicó a Cuba para hostigarla. Luego se invocó en la invasión a República Dominicana con soldados de Brasil que llevaban un brazalete de la OEA. Pero, en 1982, cuando Argentina llamó a la aplicación del Tiar porque estaba siendo agredido por Inglaterra, EEUU les pintó una de la que ustedes saben. Apoyó a su madre patria, el imperio inglés. Queda claro que el criterio es que se aplica cuando se trata de atacar a países enemigos de EEUU, pero no se aplica si EEUU dice que no. Es por ello que Venezuela se salió de ese tratado hace años, bajo la presidencia de Hugo Rafael Chávez Frías”.

 

Al analizar las amenazas que implica la activación del Tiar señaló que van desde pasos previos como el bloqueo económico, el bloqueo de transporte, el bloque de medios de comunicación, y que de no funcionar se iría a la intervención militar.

 

Una buena noticia: el diálogo

 

Pérez Pirela celebró que también haya buena noticias. Una de ellas es que parte de la oposición venezolana decidió dialogar con el gobierno nacional, a contrapelo de los extremismos guerristas de Voluntad Popular (con Leopoldo López y Juan Guaidó a la cabeza) y de dirigentes como Antonio Ledezma, María Corina Machado y Julio Borges.

 

“Hoy me reía mucho viendo el portal de Alberto Federico Ravell que dice que una encuesta indica que la mayoría de los venezolanos queremos una intervención militar extranjera. ¿Hasta dónde ha llegado el nivel de menosprecio por la inteligencia de los venezolanos y las venezolanas?”, se preguntó.

 

Leyó punto por punto el acuerdo inicial suscrito por representantes del gobierno y de varios partidos opositores minoritarios. “En lo particular, estoy de acuerdo con esto. No creo que una fracción alocada de Voluntad Popular y los otros dirigentes extremistas sean la voz de los venezolanos y las venezolanas. Ni siquiera creo que sean la voz de la oposición. Los partidos que firmaron hicieron lo correcto: no continuar secuestrados por estos tipos que son capaces de matar a su madre por llegar a Miraflores. Felicito, aupo y acompaño que una parte de la oposición haya renunciado al secuestro del ala radicalizada”.

 

Puso al aire declaraciones emitidas por Claudio Fermín en las que dijo que los opositores que suscribieron el primer acuerdo apuestan a la paz, no a la resignación ni a la violencia. Respondiendo a una pregunta sobre si esta actitud implicaba desconocer a Guaidó, Fermín dijo que el presidente de la AN había tenido una excelente oportunidad de alcanzar acuerdos en Noruega y Barbados, pero declaró que la opción estaba cancelada. “¿Qué ofrece entonces: la violencia?”, interrogó Fermín.

 

Pérez Pirela, tras asegurar que no tiene coincidencias ideológicas con Fermín, valoró su posición y deploró que la de Guaidó y el sector del que forma parte se empeñen en cerrar las vías de la conciliación. “¿Será que el negocio es que no nos pongamos de acuerdo y lograr a punta de bombas lo que no pueden lograr a punta de votos? –se preguntó-. Lo digo porque el sábado Guaidó estuvo por Bello Monte y no salió nadie a respaldarlo, y sin embargo, cada vez que habla lo hace a nombre del país, como si tuviera un apoyo mayoritario”.

 

Añadió que luego de la liberación del vicepresidente de la AN, Edgar Zambrano (quien estaba preso por haber participado en los hechos del 30 de abril), Guaidó ha pretendido atribuirse el mérito diciendo que fue producto de la presión social e internacional. “Quieren ser los héroes de una acción en la que no participaron en absoluto”.

 

También revisó las afirmaciones del propio Zambrano, quien dijo que debe privar la fuerza de la palabra. “Ojalá lo hubiera pensado así el 30 de abril, cuando estuvo en las afueras de una base aérea, con militares llevados bajo engaño y armas de guerra que iban a ser disparadas contra la población civil”.

 

Volvió sobre las declaraciones de Guaidó, a las que caracterizó como inesperadas, inéditas, fantásticas: “Ofreció que él se deslastra de su cargo de presidente imaginario, si el presidente real también lo hace. Es simplemente ridículo”.
Para el también director de LaIguana.TV, está claro que la firma del acuerdo con un sector de la oposición descuadró totalmente a la facción que se considera mayoritaria. Explicó que uno de los puntos que más les dolió fue la presencia en el acto de la Casa Amarilla de parte del cuerpo diplomático, en particular del nuncio apostólico, Aldo Giordani, pues este es el único representante directo del papa Francisco en Venezuela, por encima de cardenales, obispos y demás sacerdotes. “El Vaticano le dio un aval moral y ético a ese encuentro”.

 

No resultó sorprendente la postura de EEUU, que señaló que el único diálogo aceptable es el que conduzca a la salida de Nicolás Maduro, con lo cual no se trata de un diálogo sino de una imposición.

 

Pérez Pirela destacó la respuesta que le dio uno de los dirigentes opositores firmantes, Timoteo Zambrano, al senador estadounidense Marco Rubio, crítico feroz del acuerdo. “Le dijo que está claro que Rubio siempre toma sus posturas según sus propios intereses electorales en el estado de Florida. Eso es bueno que lo sepan todos los venezolanos, chavistas, independientes y opositores: si le trae votos, Rubio apoyará una invasión contra Venezuela”.

 

Para finalizar, manifestó su acuerdo con la opinión expresada por la analista política Maryclen Stelling, quien señaló que la suscripción del acuerdo marca un deslinde ético en la oposición y habla del innegable desgaste de la figura de Guaidó.

 

Como ya se ha hecho costumbre, Desde donde sea tuvo audiencia en diversas regiones del país y del mundo. Se reportaron usuarios en Caracas, Maracaibo, El Tocuyo, Cumaná, Güiria, Los Teques, Margarita, y también en ciudades de Brasil, Colombia, Chile, Bolivia, Perú, España, Estados Unidos, Nueva Guinea, Canadá, Ecuador y Argentina.

 

(LaIguana.TV)