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La Comisión Presidencial para la Constituyente llevará el debate sobre las bases de funcionamiento de dicho mecanismo a todos los estados del país, para ampliar más la participación popular en ese proceso, indicó Elías Jaua.

 

Jaua, quien preside dicha comisión, precisó que la idea es ampliar el rango de debate para que todos los sectores hagan sus aportes y propuestas sobre la Constituyente, órgano que tiene como norte la paz, la estabilidad política, la consolidación de los programas sociales y la promoción del debate político.

 

«La orientación que tengo del Presidente de la República es reunirnos con todo aquel que quiera reunirse, con todo aquel que quiera escuchar, que quiera criticar o aportar a la iniciativa que él ha tomado», señaló en el programa José Vicente Hoy, transmitido por Televen.

 

Mencionó que en el despliegue está previsto que la comisión se reúna con sectores empresariales, trabajadores, religiosos, alcaldes y gobernadores, para explicar los motivos y las propuestas del llamado al poder originario.

 

Paralelo al despliegue, señaló que los equipos técnicos que integran la Comisión Presidencial continuarán trabajando en la elaboración de la propuesta sobre las bases comiciales que el Jefe de Estado entregará al Consejo Nacional Electoral (CNE), poder que luego deberá fijar las condiciones, normas y plazos en las que elegirán los constituyentes.

 

Jaua ratificó que construir unas bases de convivencia mutua, donde coexistan dos modelos políticos, es uno de los objetivos de la iniciativa a Constituyente.

 

«Es una oportunidad para la estabilidad política, para resolver los problemas económicos y ampliar y consolidar el sistema de protección social, sanar las heridas sociales que ha ocasionado todo este conflicto. Requerimos estabilidad política, requerimos normas mínimas de convivencia», sostuvo.

 

Acercamiento

 

Jaua indicó que los debates sobre esta iniciativa constitucional, contemplada en los artículos 347, 348 y 349 de la Carta Magna, ha permitido el encuentro con sectores con los que no se tenía contacto regular.

 

En este sentido, expresó que pudo conversar por teléfono con el presidente de Fedecamaras, Francisco Martínez, aunque después el directorio de la asociación de empresarios se negó a debatir sobre la constituyente, y con figuras políticas de la IV República.

 

En el caso de la oposición, Jaua manifestó la preocupación de la dirección política del Gobierno por la postura que ha tomado un sector radical de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) que ha decidido no entablar diálogo con el Ejecutivo.

 

«Es muy preocupante la situación de una injustificable decisión de la MUD de no tener ningún tipo de comunicación con el Gobierno legítimo de Venezuela (…) nunca antes habíamos visto estas manifestaciones que atentan contra los valores más queridos de la sociedad», alertó.

 

Sin embargo, valoró la posición que tomaron los partidos opositores que sí acudieron a los debates sobre la Constituyente. Resaltó, en nombre de la dirección política del Gobierno, que no todos los sectores que adversan al chavismo apuestan por la violencia como forma de hacer política.

 

«Fue un debate de altura», dijo en referencia al encuentro. «Ellos expresaron sus críticas y nosotros respondimos, pero sobre todo informamos, aclaramos muchas dudas y creo que logramos responder algunas aclaratorias», añadió.

 

Negación de la CEV

 

Jaua aseveró que el Ejecutivo convocó la Constituyente tras agotar todas las vías posibles para entablar un diálogo político con la llamada Mesa de la Unidad, a fin de dirimir diferencias.

 

«La decisión del presidente Maduro responde a una preocupación de no tener un interlocutor político con quien definitivamente lograr una ruta pacífica y democrática para resolver el conflicto político que ha planteado la oposición», agregó.

 

Por ello, manifestó la preocupación del Gobierno por la negativa de la Conferencia Episcopal Venezuela (CEV) de sumarse a la iniciativa constitucional, aún cuando –recalcó– el Papa Francisco pidió a los obispos ser puentes de diálogo. «Envíe una segunda invitación y hasta ahora no hemos recibido ni una respuesta de la jerarquía católica», lamentó.

 

Denunció, además, que apenas el Ejecutivo anunció la convocatoria a Constituyente, Julio Borges, quien ejerce ilegalmente la presidencia de la Asamblea Nacional por ser electo mientras la instancia está en desacato, viajó a Washington para sostener reuniones «con la estructura de seguridad nacional y militar de Estados Unidos».

 

Tras este encuentro, Jaua alertó que en el país arreció la violencia y se comenzó a presionar «muy duro» a diversos sectores políticos para que no participen en los debates a la Constituyente.

 

«Si el diálogo no existe, existe la barbarie, y es allí donde vemos la actitud de una parte de la dirección política de la MUD, y nos preocupa la actitud de la Conferencia Episcopal, llamada a ser un puente de diálogo entre los venezolanos», cuestionó.

 

Advirtió que la oposición tiene como objetivo «arrebatar el poder» sobre la base de la «destrucción de la sociedad», y con ello «justificar la desaparición» del chavismo como fuerza corriente y popular.

 

(AVN)