En el Banco de Venezuela cobra el abogado antichavista Ricardo Emilio Koesling Nava su pensión por vejez que le deposita puntualmente el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales. Son hasta abril 40.638 bolívares, equivalente al salario mínimo, según se puede verificar en la página web de la institución. Pero que por decisión del presidente Nicolás Maduro fue aumentada en un 60 por ciento y a la que hay que sumar el “bono de guerra económica” decretado hace dos semanas. Eso lleva el pago a poco más de 84 mil bolívares.
Koesling es un personaje tradicionalmente anticomunista que desde el año 2000 ha participado en conspiraciones para derrocar el gobierno bolivariano.
Ese año representó a Juan Alvaro Rosabal, un supuesto agente de la inteligencia cubana, quien ofreció una rueda de prensa para denunciar actuaciones irregulares en el país.
Asimismo protagonizó el intento de asalto a la embajada de Cuba en Caracas, durante el fallido golpe de Estado de 2002, que alejó brevemente del poder al presidente Hugo Chávez. Fotografías y videos lo muestran arremetiendo contra vehículos de la sede diplomática.
Y aunque es público su desempeño como jurista en su propio escritorio jurídico ubicado en el CCCT, en los registros de la seguridad social aparece como trabajador de una firma denominada Inversiones La Cita, S.A.
Ese es el último empleador de Koesling para efectos de la pensión, que vistos los datos, fue obtenida fraudulentamente. Su egreso de esa empresa es el 18 de diciembre de 1998. A partir de ese momento quedó cesante con 817 semanas cotizadas.
Habiendo nacido en 1948, el abogado podía optar a la pensión a los 60 años, es decir, en el año 2008. Ya que la norma establece un mínimo de 750 semanas pagadas, podría suponerse que Koesling se acogió al pago excepcional de las cotizaciones faltantes, autorizado por el presidente Chávez para poder recibir su pensión.
Un dato llamativo es que la empresa empleadora tiene como dirección la calle principal de Mamera, número 256, en Caracas. No posee RIF y la persona responsable no aparece asentada en el Registro Electoral y tiene como año de nacimiento el de 1927.
Adicionalmente la firma (¿puede cotizarse al IVSS sin RIF o cédula?) acumula una deuda superior a 1 millón 158 mil bolívares, y es evidente que nunca canceló suma alguna.
Hasta 2007 la facturación no supera los 200 bolívares, pero luego registra aumentos importantes como si se hubiera ingresado nuevos trabajadores. En febrero de 2008 facturó 75 mil bolívares y en octubre de 2009 llegó a 236 mil. Pero sin realizarse ningún pago, ni por convenio.
