A veinte días de haber ocurrido el descuartizamiento de un peruano y un venezolano dentro del hotel “Señor de Sipán” de San Martín de Porres, en Lima, Perú, el presunto implicado en el crimen, Angelbert Díaz Colina, alias “Tarra”, este sábado 28 de septiembre reveló datos nuevos sobre el móvil, cambiando así la hipótesis que hasta el momento se manejaba.

 

Al parecer, el doble crimen no fue por delatar a la mafia del venezolano William Rondón “Machelo” ante las autoridades, sino porque el peruano asesinado, Jafet Caleb Torrico Jara, quería ser policía.

 

“A ellos (autores del crimen) eso les molestó porque en ese lugar todos ellos comercializan droga como la marihuana y la cocaína”, reveló alias “Tarra” a las autoridades, según el portal América Noticias.

 

Díaz narró además que el otro sujeto también implicado en el descuartizamiento, Jonathan Donayre Semprún, alias “Chona”, entró en la habitación del hotel, con una pistola Glock y le dijo a él que “los chicos con quienes estaban bebiendo los tuvieron que matar”.

 

Alias “Tarra” dijo que “Chona” le confesó que había matado a los dos jóvenes porque el peruano quería ser policía y al venezolano, sencillamente porque llevó al peruano a ese lugar.

 

“Escuchaba unos ruidos medios raros como martillazos. Entran al cuarto Chona y Ale que estaba con el cuchillo en la mano. Me decía que él hacía esas cosas en Venezuela. Escuché que decían que ya habían comenzado a picar”, explicó Díaz Colina.

 

Por su parte, el perito psicológico forense del departamento de Criminalística de la Dirincri, Carlos Carrión, indicó que el perfil psicológico al que se sometió Angelbert demostró que el delincuente sí estuvo presente en la tortura y descuartizamiento.

 

Los especialistas definieron a alias “Tarra” como un sujeto “frío, calculador, con amplia capacidad para manipular, desafiante y violento, que valora únicamente sus necesidades emocionales y muestra desprecio por las necesidades de su prójimo”, además de admitir que sí consume drogas.

 

(LaIguana.TV)