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Anna Allen, actriz española conocida por su participación en la serie «Cuéntame cómo pasó», se inventó toda una carrera en Hollywood sustentada a través de imágenes falsas en redes sociales.

 

La actriz informó que había participado en capítulos especiales de «The Big Bang Theory» y «White Collar», e incluso que asistió a la entrega de los Premios Óscar en 2014 y 2015.

 

A través de su sitio web oficial y sus redes sociales, Allen publicaba fotografías de sus supuestos trabajos y actividades en Hollywood, pero su mentira se descubrió, pues robó imágenes publicadas por famosas como Lupita Nyong’o y Sophia Bush, y las hizo pasar como propias.

 

Incluso cambió su rostro en los cuerpos de otras actrices para “presumir” sus trabajos en la industria del entretenimiento.

 

Las invenciones de la actriz no se limitan sólo a cuestiones laborales (los Óscar, el cameo en la celebérrima “The Big Bang Theory”, su intervención en “White Collar” con Matt Bomer…), todos ellos “certificados” con su correspondiente fotomontaje. También miente respecto a sus colaboraciones con determinadas marcas y organizaciones sin ánimo de lucro.

 

“Soy embajadora de la marca Vertu y de Fight Aids, junto con Estefanía de Mónaco”, contó la propia Allen a LOC cuando le preguntamos en qué proyectos andaba metida (claro, no iba a contestar “intentar estafarlos a todos”). Pues bien, según ha verificado LOC, ni lo uno ni lo otro es cierto.

 

“No es verdad, esta actriz no es embajadora de nuestra marca. Pero le gustan mucho nuestros teléfonos y nuestro consejero delegado le regaló un Aster”, detalla el departamento de marketing de Vertu. Un modelo el que le regalaron que, por cierto, está valorado en cerca de 5.000 euros.

 

Asimismo, esta misma mañana, LOC se ha puesto en contacto con la sede en Mónaco de la asociación Fight Aids (de lucha contra el Sida) para corroborar que “la pequeña Nicolasa” (como han llamado algunos medios a la actriz) sea, junto a la princesa Estefanía, una de sus embajadoras. “Ninguna actriz española es embajadora de Fight Aids porque, además, no existe esa figura en nuestra asociación. Ni siquiera para nuestra princesa, que es la presidenta”, aseguran.

 

De hecho, el único vínculo de Anna Allen con esta asociación es un vídeo colgado en el canal de Youtube de la asociación monegasca en el marco de la campaña «One kiss, one fight», promovida por la misma. Cualquiera podía participar a través de un selfie o un vídeo mandando un beso o un mensaje de tolerancia contra la discriminación que viven las personas con VIH.

 

Tras el destape de la historia, las redes sociales de Allen están deshabilitadas y ella no ha hecho comentarios al respecto.

 

(El Universal de México/El Mundo de España)

 

 

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