El diputado del Bloque de la Patria a la Asamblea Nacional por el estado Apure, Orlando Zambrano, denunció recientemente el esquema trazado por sectores de la derecha nacional e internacional para sembrar el paramilitarismo en Venezuela, a fin de derrocar el Gobierno Bolivariano mediante la intromisión de grupos irregulares que vienen generando cruentos focos de violencia en algunas ciudades del país.
En tal sentido, detalló que «se ha incrementado la presencia activa de grupos paramilitares en lo que tiene que ver con el posicionamiento territorial (…) para sembrar el terror e intimidar a la población, y convertirse en una fuerza territorial que amenace los intereses de la Revolución Bolivariana».
Asimismo, detalló la propagación de células insurreccionales en provincias estratégicas, como el estado Táchira, el cual se ha convertido para el paramilitarismo en el principal centro de retaguardia profunda.
«Tienen cerca una fuerza de apoyo de unidades paramilitares ligadas al narcotráfico, al contrabando, y que esa fuerza se convierta en un referente de organización y de acciones paramilitares para ir demostrando al resto del país que se pueden generar procesos insurreccionales con el empleo de grupos paramilitares».
Para Zambrano, el objetivo de este plan de inyección terrorista por estado tiene como fin cercar a Caracas (desde las regiones centrales: Altos Mirandinos, Maracay) por ser el centro del poder político nacional.
De igual forma, argumentó que otro de los objetivos planteados por la derecha a través de esta incursión es intentar minar a los sectores populares, donde se concentran las fuerzas chavistas, «incorporando droga, bandas, grupos paramilitares, para seguir en la avanzada territorial».
No obstante, es preciso añadir que esta estructura de sedición callejera, en la figura del paramilitarismo, está siendo operada medularmente por Voluntad Popular en conjunto con Primero Justicia, partidos de extrema derecha que controlan la dirección de la agenda golpista.
(LaIguana.TV)
