El presidente electo de la República de Argentina, Alberto Fernández, aseveró recientemente que está dispuesto a reconstruir y reimpulsar la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para fortalecer la integración regional.

 

«Está todo disperso, nos han dividido peligrosamente (…) Se hicieron cargo los poderes dominantes», expresó Fernández, durante una entrevista con  el expresidente ecuatoriano, Rafael Correa, en el programa Conversando con Correa producido por RT en Español.

 

Hizo énfasis en que la unidad del continente es el modo que tiene América Latina para enfrentar la globalización. «No hay otro modo», aseguró.

 

Durante de la reunión que sostuvo recientemente con su homologo de México, Andrés López Obrador, que la calificó de «muy buena», destacó que la integridad de la región fue el tema central.

 

«Tal vez el país más norteño de la América Latina y el país más al extremo sur de América Latina puedan construir un eje que reviva de vuelta la unidad»,indicó.

 

En este sentido, dijo que para lograr ese objetivo es necesario trabajar en ese proceso integrador, ya que Latinoamérica vive un proceso de desintegración creciente con múltiples acuerdos regionales que ninguno se respeta, entre ellos el Acuerdo del Pacífico, el Pacto Andino, el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unasur.

 

Por otra parte, Fernández criticó la persecución judicial o la guerra jurídica ejecutada en algunos países de la región. «Mi padre era juez de la Cámara del Crimen.Y yo aprendí de mi padre la importancia de la justicia», expresó.

 

En su opinión, el Estado de derecho, el respeto a las libertades, el respeto al debido proceso y una justicia independiente son reglas absolutas.

Destacó que en Latinoamérica la justicia dejó de ser independiente y empezó a ser manipulada por el poder, además, señaló que fracasó el debido proceso legal que exige que uno tenga un juicio transparente, en el cual se pueda probar la inocencia en libertad y la prisión preventiva se convirtió en regla.

«La justicia, por todo esto, dejó de ser independiente y empezó a servir al poder de turno en varios lugares de la región, incluido Chile, pero hay tres focos, donde resalta este deterioro del sistema judicial: Brasil, Argentina y Ecuador», aseveró el mandatario argentino.

 

Sostuvo que el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha sido acusado de tener un departamento que supuestamente le dio una empresa constructora, subsidiaria de Odebrecht, «pero no existe ni una prueba documental que diga que efectivamente compró ese inmueble».

 

Indicó que el uso indebido de la justicia en Ecuador, Brasil y Argentina se ha visto con toda claridad, sin embargo, en Brasil se ha manifestado de una forma «escandalosa».

 

«El juez que condena a Lula, diciendo que aunque no tiene pruebas fidedignas, tiene la íntima convicción de que Lula era el dueño, así lo condenan; ese juez hoy es ministro de Justicia de Bolsonaro», resaltó.

 

(AVN)