«Mucha gente pensará que el pueblo boliviano es sumiso y obtuso. En mis visitas a ese país he visto lo contrario: es un pueblo activo, participativo, organizado en millares de grupos sociales. Mineros, confederaciones de trabajadores, movimientos feministas. Una vez estuve en Cochabamba y había una plaza en la que todo el día estaba la gente discutiendo. En el Tahuantisuyo vi batallones de indígenas debatiendo sus asuntos. Allí una señora me dijo que los españoles habían llegado hasta esas alturas creyendo que las calles estaban pavimentadas de oro, que se lo robaron todo, pero que no les sirvió de nada porque se lo dejaron quitar. Era una señora viejita y tal vez ni siquiera estaba alfabetizada, pero demostraba una gran sabiduría. En fin, no es un pueblo sumiso e ignorante. Y ahora esa dictadura se ha declarado como lo que es: una maquinaria de exterminio de ese pueblo».

 

Así lo afirmó Luis Britto García, durante la transmisión de Desde Donde Sea el pasado jueves con el filósofo Miguel Ángel Pérez Pirela.

 

Las fuerzas de la derecha ya no respetan ningún límite: ni resultados electorales ni cifras macroeconómicas. Contra cualquier gobernante progresista desatan la respuesta de la violencia y arrebatan el poder.

 

(LaIguana.TV)