“El expresidente brasileño Luiz Ignacio Lula da Silva, -preso político desde el 7 de abril de 2018-, escribió el pasado 30 de septiembre, una carta dirigida al pueblo brasileño y la entregó a sus abogados Cristiano Zanin y Valeska Teixeira, para que la hicieran pública.

 

En el manuscrito el exmandatario nacional rechazó el supuesto beneficio que a modo de trampa le propuso, para ese entonces, el Ministerio Público Federal de Paraná, “no acepto ningún regateo ni de mis derechos ni de mi Libertad”.

 

Dijo además que el Supremo Tribunal Federal le corresponde juzgar la anulación de todos los actos jurídicos del juez que lo condenó maliciosamente y actual ministro del presidente Jair Bolsonaro, Sérgio Moro, citó Aporrea.

 

La carta integra dice:

 

No intercambio mi dignidad por mi Libertad.

 

Lo único que tendrían que hacer los procuradores de la Lava Jato es pedir disculpas al Pueblo Brasileño, a los millones de desempleados y a mi familia, por el mal que hicieron a la Democracia, a la Justicia y al país.

 

Quiero que sepan que no acepto ningún regateo ni de mis derechos ni de mi Libertad.

 

Ya demostré que son falsas las acusaciones que me hicieron. Son ellos y no yo quienes están presos de las mentiras que contaron a Brasil y al Mundo.

 

Ante las arbitrariedades cometidas por los Procuradores y por Sérgio Moro, le corresponde ahora a la Suprema Corte corregir lo que está mal, para que actúe la justicia independiente e imparcial. Como le corresponde a todo ciudadano.

 

Tengo plena conciencia de las decisiones que tomé en este proceso y no descansaré hasta que la verdad y la Justicia vuelvan a prevalecer.

 

(LaIguana.TV)