El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, aseguró el jueves que nunca ha intervenido para proteger a nadie, incluyendo a familiares, un día después de que un fiscal acusó a su hermano de traficar durante años toneladas de cocaína a Estados Unidos bajo su protección.

 

El nombre del mandatario fue mencionado el miércoles al iniciar, en una corte de Manhattan, un juicio a uno de sus hermanos, Juan Antonio “Tony” Hernández, arrestado en Miami en 2018 y quien enfrenta cargos de conspiración para traficar de drogas y posesión de armas ilegales.

 

“Nadie está por encima de la ley y (…) nunca he intervenido ni lo voy a hacer para proteger a nadie, ni amigos, ni correligionarios, ni familiares, absolutamente a nadie”, dijo Hernández en un mensaje a la prensa.

 

El fiscal federal Jason Richman afirmó el miércoles que “Tony” Hernández recibió personalmente un soborno para su hermano del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, lo que fue rechazado por el presidente hondureño.

 

Hernández, quien comenzó su segundo mandato en enero de 2018 en medio de acusaciones de fraude electoral, ha negado reiteradamente estar involucrado en el tráfico de drogas diciendo que era blanco de una “campaña de desprestigio” de opositores, incluidos narcotraficantes y políticos.

 

(Reuters)