Ankara no permitirá que el grupo terrorista ISIS* regrese a Siria, aseveró el portavoz de la Presidencia turca, Ibrahim Kalin.

 

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró el 5 de octubre que Ankara podría lanzar en los próximos días una operación en el norte de Siria, al este del Éufrates, para expulsar de la frontera a las fuerzas kurdosirias, crear una zona de seguridad y alojar allí a los refugiados sirios, que de momento se encuentran en Turquía.

 

«Turquía también continuará luchando contra ISIS y no permitirá de ninguna forma su renacimiento», tuiteó Kalin.

 

La zona de seguridad en Siria, explicó, tendrá como objetivo abatir a los terroristas para proteger las fronteras turcas, así como devolver a los refugiados a sus hogares.

 

Según el diplomático turco, Ankara apoya la integridad territorial y la unidad política de Siria y no busca ocupar el territorio sirio ni cambiar su composición demográfica.

 

«Turquía lucha contra una organización terrorista que también asesina y oprime a los kurdos», agregó.

 

Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) —alianza de milicias árabes y kurdas que controlan el noreste de Siria— declaró que una intervención militar de Turquía daría al traste con sus operaciones para eliminar las últimas bolsas de resistencia de ISIS.

 

*autodenominado Estado islámico, prohibido en Rusia y otros países

 

(Sputnik)