El sesgo mediático que se mantiene en Ecuador desde que el pasado viernes el régimen de Lenín Moreno decretara Estado de Excepción en todo el país contra la ciudadanía, ha mantenido oculto lo que pasa en realidad dentro del país andino, envuelto en masivas manifestaciones populares que son duramente reprimidas por el Ejército y la policía.

 

Las protestas en Ecuador se originaron luego que Moreno aplicara un paquetazo económico contra la población, que además de liberar los precios de los combustibles, implicó medidas contra los derechos laborales conseguidos por los trabajadores ecuatorianos como el disfrute de vacaciones de 30 días, ahora recortado a 15 días; disminución de 20% en salarios a personas con contratos temporales, despidos masivos en la administración pública que ya superan los 23.000 puestos de trabajo, reformas contra el sector de los jubilados, entre otras, solo para cumplir con órdenes emanadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI).

 

Tras decretarse el Estado de Excepción la ciudadanía registró la salida de varios tanques del Ejército que tomaron las calles del casco histórico de Quito para ejecutar la orden de Moreno.

 

Al respecto, el periodista Jorge Forero del medio «Trochando sin fronteras», realizó un resumen este lunes desde Cuenca, la tercera ciudad más grande Ecuador, luego de Quito y Guayaquil, donde también hay fuertes manifestaciones, y comentó que desde que Moreno implementó las medidas impopulares, las protestas de los distintos sectores de la sociedad se mantienen activos en las calles, como el cierre de vías, paro de transportes y protestas de las comunidades originarias.

 

Acotó que tanto las centrales obreras como el movimiento indígena anunciaron una nueva jornada de paro para el miércoles 9 de octubre, debido a que el régimen se niega a negociar y a echar para atrás el paquetazo.

 

Detalló que las comunidades indígenas son las que más están organizadas y se mantienen en movilización permanente, lo que ha ocasionado que sean uno de los principales objetivos de la represión militar y policial.

 

De hecho, este domingo las comunidades indígenas decidieron decretar un «Estado de Excepción» contra la fuerzas represoras al prohibir que estas tengan presencia en sus territorios, es decir, en caso de encontrar algún funcionario militar y/o policial en sus zonas, serán capturados y «sometidos a la justicia indígena».

 

«Siguiendo esta decisión hubo un caso en Alausí, donde 47 soldados fueron retenidos y se mantienen en manos de las comunidades indígenas que esperan una negociación con el Gobierno», comentó Forero, quien agregó que en distintas ciudades se han presentado confrontaciones de estas comunidades con militares y policía expulsados.

En las vías bloqueadas se han presentado varios episodios de violencia por la persecución del gobierno de Moreno, indica Forero, hechos que han ocasionado «altísimos niveles de represión» que se evidencian en los heridos que llegan al Hospital de Cayambe, cercano a Quito, el cual se encuentra «saturado» por los heridos de la represión.

 

Forero comentó que para este martes otro grupo de transportistas de varias ciudades van a realizar un paro de actividades, una de ellas la ciudad de Cuenca.

 

Agregó que la situación real en Ecuador no está bien informada debido al «cerco mediático», que genera que la población no tenga certeza sobre lo que sucede, pues «los medios privados solo informan la postura del Gobierno» sobre el falso «estado de tranqulidad».

 

(LaIguana.TV)