El presidente de Bolivia, Evo Morales, reiteró su llamado a la paz, a la tolerancia y al respeto de todo el pueblo, frente a las más recientes acciones de violencia contra las mujeres o ciudadanos indígenas promovidas por grupos opositores en el Estado Plurinacional.

 

«Ante el racismo y la violencia, nuestro pueblo pide paz social con tolerancia y respeto por los más humildes. La Patria se construye con la unidad y solidaridad de todos, profesionales, obreros, intelectuales y sectores sociales, de este a oeste y de norte a sur», escribió el presidente Morales este viernes en el Twitter.

 

Recientemente, en las ciudades de Cochabamba, La Paz y Santa Cruz se presentaron incidentes de violencia contra las mujeres de pollera o raza indígena, hechos que fueron repudiados por representantes de Organizaciones Sociales de Mujeres por la Revolución Democrática y Cultural repudiaron los hechos.

 

El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, denunció este jueves los actos violentos y racistas contra luchadoras sociales alentados por sectores de la oposición y expresó: «Esto es fascismo, una oleada fascista atacan mujeres, agredirlas por su condición étnica. Esto es un peligro para la democracia».

 

La violencia callejera y desestabilización promovida por la oposición en Bolivia comenzó al día siguiente de las elecciones que se realizaron el 20 de octubre pasado en las cuales el presidente Morales fue reelecto con 47,08% de los votos del pueblo, con el 100% del escrutinio.

 

En las ciudades de Santa Cruz (este), Cochabamba (centro), Tarija (sur) y La Paz (este) se han registrado conatos de enfrentamiento contra servidores públicos en adyacencias a sus lugares de trabajo, a quienes también buscan captar para protestas, reseña Xinhua.

 

El ministro de Defensa, Javier Zavaleta, por su parte, acusó al dirigente opositor Luis Fernando Camacho de incitar a la violencia y promover actos de desestabilización en el país y el Gobierno de Bolivia denunció estas acciones como un plan golpista.

 

(AVN)