El expresidente de Ecuador, Rafael Correa, analizó los desafíos de la izquierda y el progresismo en América Latina. En este sentido, precisó que la puesta en marcha de la judicialización de la política, que hizo posible el encarcelamiento de Lula, le robó la democracia a Brasil. Asimismo, profundizó en el escenario político de Ecuador y la situación en Venezuela.

 

Al ser consultado si se inscribiría como vicepresidente en Ecuador, siguiendo los pasos de la expresidenta de Argentina, Cristina Fernández, Correa destacó que llegarían las trampas, tal como ocurrió en Brasil con el líder del Partido de los Trabajadores (PT) Luiz Inácio Lula da Silva.

 

“Va a ser lo mismo que con Lula. Entiendan que con lo de Lula no solo le robaron la libertad, le robaron la democracia a Brasil, porque si Lula hubiera sido candidato, que tenía derecho a serlo, el presidente actual sería él. Yo no estoy preso porque vivo fuera del país”, respondió el expresidente de Ecuador, durante una entrevista concedida al diario El País.

 

¿Qué ha ocurrido en Ecuador?

 

Correa también se refirió a la ola de protestas populares que sacudieron Ecuador: “Fue un acumulado después de un año y medio de destrucción”. Asimismo, aseguró que estas manifestaciones “no se han visto en la historia contemporánea del país, ni tampoco la represión que hubo. Eso no se había visto ni en dictadura militar”.

 

A propósito de esto, destacó la traición del actual presidente Lenín Moreno quien “repartió todo el país entre todos nuestros adversarios, enemigos, porque nos consideran sus enemigos de clase”.

 

Correa comparó el gobierno de la Revolución Ciudadana con la gestión neoliberal de Moreno. “Nosotros dejamos la economía creciendo, en 2017, un 2.4%; en 2018, ya con el Gobierno de Lenín Moreno, un 1.4%; en 2019 vamos a decrecer, subió el desempleo, la inseguridad, la pobreza y se vendió al Fondo Monetario Internacional”, detalló.

 

Por otro lado, el expresidente ecuatoriano diferenció al pueblo indígena de su dirigencia. “Yo apoyo al pueblo indígena (…) Otra cosa es la dirigencia indígena, que es aliada del gobierno”.

 

Los desafíos para la izquierda en América Latina

 

Ante una pregunta relativa al auge y derrotas de los gobiernos de izquierda, Correa consideró que lo que ocurre es que “nos malacostumbramos a ganar todo, todo el tiempo”, al tiempo que destacó que entre el año 2002 y el 2014 América Latina creció, mientras Europa estaba en recesión y Estados Unidos no crecía.

 

“Tenemos menos gobiernos progresistas que en 2013, pero compárelo con los noventa. La segunda vuelta de nuestro país era derecha contra más derecha. El modelo progresista fue, por donde se mire muy exitoso. Claro, quieren decir que fue por el fin del boom de los commodities…”, recordó según entrevista publicada al diario El País, de España.

 

En relación a los desafíos de la izquierda y el progresismo consideró que se debe “vencer la pobreza, crecer con dignidad, también es necesaria la integración, tener más participación en el mundo y para eso se debe ir como bloque”.

 

En este sentido, Correa aclaró que no se trata de bloques ideológicos sino de “bloques por necesidades económicas, como Unasur”.

 

“¿De qué nos sirve ir a mostrar nuestras diferencias en Washington? Nosotros trabajamos con gobiernos de derechos. Uribe participó en la gestión de Unasur, Sebastián Piñera (…) Nos entendíamos muy bien”, afirmó.

 

En relación a los liderazgos en las fuerzas de izquierda en la región, destacó los fundacionales como los de Hugo Chávez en Venezuela, Evo Morales en Bolivia y Lula Da Silva en Brasil.

 

La situación de Venezuela

 

En relación a situación de Venezuela, el expresidente ecuatoriano indicó que el país caribeño “está en un estado de guerra, está siendo agredida».

 

«¿Cómo voy a juzgar la economía venezolana si no puede vender su petróleo? México, si sufriera las situaciones que está viviendo Venezuela, no sé si duraría tres meses”, aseguró.

 

Correa recordó que el problema de Venezuela inició en el año 2014 cuando se produjo el desplome del precio del petróleo e insistió en el levantamiento de las sanciones y en el diálogo.  

 

(LaIguana.TV)