El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró este domingo 10 de noviembre que la decisión de llamar a nuevas elecciones en dicha nación suramericana fue para preservar la paz en el país.

 

En declaraciones a teleSUR, Morales sostuvo que la Organización de Estados Americanos (OEA) ha tomado una decisión política respecto a los resultados de los comicios realizados hace semanas en Bolivia. Sin embargo, recalcó que su Gobierno acepta esta disposición del organismo internacional.

 

“Los grupos de oposición radicales no aceptan los resultados obtenidos en las elecciones, ahora no aceptan las decisiones de la OEA, he realizado un llamado al diálogo y tampoco lo aceptaron”, dijo.

 

El mandatario detalló que el golpe de Estado en marcha empezó al día siguiente de las elecciones. “La oposición envía a sus militantes a quemar las instancias del Estado, grupos violentos buscaban incendiar la ciudad de La Paz, luego el amotinamiento policial”, añadió.

 

“Los grupos de oposición están incitando a la violencia, nosotros estamos previniendo esa violencia por eso no hemos hecho nada a la fuerza (…) Varios países alrededor del mundo han enviado sus muestras de solidaridad y han saludado la decisión de llamar a nuevas elecciones, sin embargo, la oposición rechaza estas medidas”, manifestó.

 

En ese sentido, hizo un llamado a los representantes políticos a no seguir dañando a Bolivia, la economía del país y a ser solidarios con el pueblo. “Solo los que tienen objetivos personales quieren radicalizar las medidas”, agregó.

 

“Para llegar a un consenso necesitamos el diálogo no la violencia, no estar quemando las casas de representantes, es algo inhumano lo que están realizando (…) Con las Fuerzas Armadas no existe ningún problema, no van a salir a la calle, ellos tienen otros objetivos para cuidar la frontera, la lucha contra el narcotráfico y la seguridad de las empresas nacionales recién inauguradas”, sentenció.

 

(LaIguana.TV)