El exvicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, ahora exiliado en México, destacó que «los responsables del actual gobierno golpista», en referencia a la Administración de la autoproclamada mandataria, Jeanine Áñez, «tendrán que responder por sus actos».

 

«Ni una sola causa judicial abierta para encontrar a los responsables de 32 muertos», recordó García Linera en una entrevista al ‘El Zoom’, al aludir a los fallecidos en Bolivia desde que estalló el conflicto.

 

El Gobierno de facto ha sido señalado por la represión contra simpatizantes de Evo Morales —también exiliado en México—, que se oponen al golpe de Estado y piden el regreso del mandatario depuesto mediante masivas concentraciones y movilizaciones de calle.

 

García Linera ha afirmado que tanto Luis Fernando Camacho, el hombre que encabezó el golpe de Estado en Bolivia, como Carlos Mesa, el candidato de derecha que perdió en los comicios de octubre, y Jeanine Áñez, la autoproclamada presidenta interina, «se han manchado de sangre».

 

De Camacho, el exvicepresidente dijo que «tiene una lista, al igual que Pablo Escobar, el conocido narcotraficante que ensangrentó a Colombia, donde anota a las personas que hablan mal de él».

 

«Ellos son los responsables y, más pronto que tarde, en un mes, en un año, o en cinco años, van a tener que asumir su responsabilidad ante los tribunales nacionales e internacionales por asesinato, muerte y genocidio», subrayó.

 

Respecto, al anuncio por parte del operador Cotas de cesar la emisión de RT en Español en Bolivia, a partir del 2 de diciembre, García Linera se preguntó: «¿De qué tipo de régimen y libertad constitucional habla si se está impidiendo a un periodista que pueda informar lo que corresponde, lo que sea verdad?».

 

Respaldo militar

 

Asimismo, el exvicepresidente recordó que fue William Kalimán, el mismo militar que instó a Morales a renunciar, quien colocó a Áñez la banda presidencial durante su autoproclamación. «Su autoridad [la de Áñez] se basa en eso, en el respaldo de las Fuerzas Armadas y de la Policía», subrayó.

 

«Al día siguiente [de su autoproclamación] sacó a policías y militares para generar 32 muertos, más de 400 heridos a bala, más de 1200 detenidos. Una persecución de líderes sindicales y parlamentarios. Tanquetas en la plaza y tanquetas en las calles. Es un estado policial y militar el que ahora se impone», afirmó.

 

Nuevas elecciones

 

El pasado 23 de noviembre, ambas Cámaras de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) aprobaron por unanimidad el Proyecto de Ley de Régimen Excepcional y Transitorio para la realización de elecciones generales, que anula los resultados de los comicios del 20 de octubre, que dieron por ganador a Morales.

 

Tras sellar el Gobierno de facto Áñez un acuerdo legislativo con el Movimiento al Socialismo (MAS), la nueva normativa establece que «las y los ciudadanos que hubieran sido reelectos de forma continua, a un cargo electivo, durante los dos periodos constitucionales anteriores, no podrán postularse como candidatos al mismo cargo electivo», lo que significa que ni Morales, ni García Linera podrán presentarse en la nueva contienda electoral.

 

«Lo que ha hecho la Asamblea es fijar una convocatoria de elecciones lo más pronto posible para que se vaya este régimen golpista al que, por supuesto, solamente le da ahorita poder y fuerza el apoyo de la Policía y las Fuerzas Armadas y, seguramente, algún conglomerado de medios de comunicación», aseveró.

 

Además, el exfuncionario recordó que tanto Morales como él estuvieron dispuestos a ir unas nuevas elecciones. «Dijimos: que se convoquen, se organice un nuevo órgano electoral y Evo y Álvaro no van a ser candidatos. Lo dijimos el día 9 de noviembre. Han pasado casi 15 días: 32 muertos, 400 heridos y el resultado es el mismo», puntualizó.

 

Bajo su punto de vista, se deseaba llevar a cabo «una campaña de venganza e intimidación hacia las fuerzas populares». «Querían incluso a Evo muerto si fuera posible, mínimo Evo detenido. No lo lograron con Evo pero, lamentablemente, está su campaña de venganza y de agresión hacia los sectores populares, que ha dejado este saldo terrible y junto a ello una economía destrozada» argumentó.

 

Elecciones transparentes

 

En referencia a la Organización de Estados Americanos (OEA), que publicó un informe preliminar con supuestas «irregularidades» en los comicios del 20 de octubre, el exvicepresidente criticó la manera en que se realizó y aseguró que ellos nunca tuvieron «nada que esconder» y que su victoria fue «contundente».

 

Por otro lado, reprobó que hasta la fecha la organización no haya emitido un informe final de la auditoría hecha a los comicios del 20 de octubre.

 

«El informe final que tenían que entregar hace 15 días no aparece. ¿Qué estarán cocinando? ¿qué tipo de barbaridades estarán haciendo?», preguntó.

 

De cara a los nuevos comicios, dejó claro que «si va a estar la presencia de la OEA» y si sigue «la persecución a líderes y políticos», no podrán celebrarse en Bolivia «elecciones libres y transparentes».

 

«Nuestro objetivo es regresar»

 

El exvicepresidente explicó que junto a Morales han dedicado su vida en defender a los sectores humildes de Bolivia. «Lo vamos a seguir haciendo. Solamente matándonos van a detener nuestra decisión de regresar y estar junto a los trabajadores, campesinos, indígenas, obreros, vecinos, jóvenes y mujeres», enfatizó.

 

«Tarde o temprano vamos a estar en Bolivia. No sabemos cuándo, pero nuestro objetivo es nuevamente regresar a Bolivia y estar al lado del pueblo en esta lucha democrática», concluyó.

 

(RT)