El líder de Corea del Norte afirma que el misil lanzado el 4 de julio fue un ‘regalo’ para los ‘bastardos estadounidenses’ en el Día de Independencia de EE.UU.
“Los bastardos estadounidenses no van a estar muy contentos con ese regalo enviado por el aniversario del 4 de julio (Día de la Independencia de EE.UU.)”, ha escrito este miércoles la agencia oficial norcoreana KCNA citando las declaraciones del líder norcoreano, Kim Jong-un, en alusión al ensayo de un misil realizado el martes.
“Debería enviarles regalos de vez en cuando para ayudarlos a salir de su aburrimiento”, ha declarado Kim tras reírse a carcajadas.
Corea del Norte lanzó el martes un misil balístico hacia el mar del Este (mar de Japón) a las 9:40 horas en Panghyon, en el norte de la provincia de Pyongan (al norte de la capital Pyongyang).
KCNA también ha anunciado que el misil balístico ICBM (siglas inglesas de misil balístico de alcance intermedio) que ensayó el martes es capaz de transportar “carga nuclear grande y pesada” y ha destacado que la prueba ha permitido comprobar que su ojiva es capaz de volver a entrar en la atmósfera, según la fuente.
Poco después de la prueba, el líder norcoreano la calificó de “exitosa” y resaltó la estrátegica capacidad armamentística de Pyongyang que “incluye las bombas atómicas y de hidrógeno así como los ICBMs”, según KCNA.
“El líder norcoreano dijo que no negociará con Estados Unidos y no renunciará a las armas hasta que Washington abandone su política hostil hacia Corea del Norte”, informa KCNA.
Según confirma EE.UU., el misil balístico norcoreano —lanzado el martes— voló más tiempo que cualquier prueba de misiles de Pyongyang llevada a cabo hasta la fecha, un total de 37 minutos, lo que implica el país podría tener la capacidad de atacar al estado de Alaska.
En los últimos años, Pyongyang ha llevado a cabo una serie de pruebas nucleares y balísticas que ha reavivado las tensiones en la península de Corea.
Corea del Norte ha denunciado en reiteradas ocasiones que es blanco de actos hostiles de Washington, como el despliegue de activos nucleares estratégicos en la zona y ejercicios militares conjuntos con Seúl, lo que a su juicio, refuerza la posibilidad de que estalle “una guerra nuclear” en la península coreana.
