Una técnica desarrollada en Argentina para curar y prevenir una fiebre hemorrágica propia de sus zonas rurales con el plasma hiperinmune de enfermos recuperados, es una de las referencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para tratar a pacientes con ébola.
En 1971 el investigador argentino Julio Maiztegui (1931-1993) demostró que se podía reducir la mortalidad de la fiebre hemorrágica argentina -o mal de los rastrojos- del 30% a incluso 1% en los pacientes tratados con plasma de personas que sobrevivieron al mal y crearon anticuerpos contra el virus transmitido por roedores. Para esta terapia es crucial la administración del plasma en los primeros ocho días del contagio.
Por ello es imperante detectar a tiempo la enfermedad, explicó a la AFP la doctora Ana María Briggiler, especialista del Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas Dr. Julio I. Maiztegui, que desarrolló la técnica y que depende del Ministerio de Salud argentino.
La fiebre hemorrágica argentina es la única en su tipo que se trata con plasma o suero hiperinmune y cuya eficacia está demostrada y publicada internacionalmente con el aval de la OMS. También lograron en los años 80 desarrollar la vacuna que previene el contagio.
Estas son las razones que llevaron a la OMS a realizar consultas al equipo de investigadores argentinos.
«Es un tema que está en una fase muy preliminar», indicó Briggiler. «Hemos tenido algún contacto con la OMS para trabajar en eso», agregó sobre el intercambio con la organización mundial que está manejando el brote de ébola en África del Oeste.
Hasta el 19 de octubre se registraron 4 mil 877 muertos entre casi 10 mil personas infectadas de ébola, principalmente, en Liberia, Sierra Leona y Guinea.
España y Estados Unidos también registraron casos de infección que han sido superados en su mayoría.
Briggiler apuntó que «hay muchas cosas que poner a punto antes de iniciar un plasma».
Entre los aspectos para considerar la terapia con plasma hiperinmune destacó un diagnóstico preciso y a tiempo de los pacientes con ébola, normas de seguridad y desarrollar los métodos «para tener la certeza de contar con el plasma de una persona que haya tenido ébola y no un cuadro febril por otra causa».
El martes, Marie Paule Kieny, médica portavoz de la OMS en Ginebra, citó esta técnica argentina, con éxito comprobado, cuando anunció que en las próximas semanas empezarán a colectar sangre para tratarla y empezar el proceso para crear el plasma con anticuerpos.
(AFP)