El líder supremo de Irán, Alí Jameneí, aseguró este miércoles que el ataque contra una base con presencia estadounidense en Irak «no es suficiente» venganza y que es necesario expulsar a las tropas de ese país de la región de Oriente Medio. 

 

Justo al terminar los tres días de funerales de Soleimaní, la Guardia Revolucionaria lanzó este bombardeo, subrayando que es «un primer paso de su dura venganza» y que cualquier acción de EEUU «enfrentará una respuesta más dolorosa y aplastante«.

 

(EFE)