Desde el accidente de esquí sufrido en los Alpes franceses en 2013 que dejó a Michael Schumacher con graves daños cerebrales, el estado de salud del expiloto alemán es un gran misterio.

 

Es por ello que cada comentario acerca de la condición de la leyenda de la Fórmula 1 se convierte en noticia y se difunde rápidamente por medios de comunicación y redes sociales.

 

Una de las últimas referencias a la recuperación de Schumacher fue ofrecida en diciembre pasado por su esposa Corinna. Días antes del sexto aniversario del accidente, aseveró que «las cosas grandes comienzan con pequeños pasos», dando de esta manera esperanza a los numerosos fanáticos del expiloto alemán.

 

Las consecuencias del trauma

 

Poco después, el portal italiano Motosport pidió a Nicola Acciarri, neurocirujano del Hospital Bellaria de Bolonia y gran entusiasta de la F1, comentar las palabras de Corinna y ofrecer su opinión sobre el estado de Schumacher.

 

«Evalúo estas palabras con mucha cautela, porque nadie tiene evidencia de lo que se dice públicamente y, entre otras cosas, se informa muy poco. Es difícil entenderde qué base científica parte», afirmó el médico, cuya entrevista con el medio italiano se difundió ampliamente en los últimos días por numerosos medios.

 

Acciarri sugirió que, actualmente, Schumacher debe tener «una estructura orgánica, muscular y esquelética muy alterada y deteriorada» como consecuencia de la grave lesión cerebral que sufrió.

 

«Está claro que, imaginando la situación del campeón seis años después del trauma, tenemos que imaginar a una persona muy diferente de lo que recordamos en las pistas», lamentó el neurocirujano italiano.

 

(RT)