El diputado Juan Guaidó, líder de la oposición extremista que apuesta por una salida antidemocrática mediada por la injerencia extranjera frente a la conflictividad política que atraviesa el país, se reunió este jueves con el Secretario de Estado de la administración de Donald Trump, Mike Pompeo.

 

Dicho encuentro tendría el propósito de hacer “seguimiento a nuestros acuerdos en el marco de la Cumbre Antiterrorista, según difundió Guaidó a través de su cuenta en Twitter. 

 

En ese sentido, el político expresó diáfanamente los resultados de los acuerdos alcanzados en la Cumbre Antiterrorista, punto de inicio de la “gira” internacional emprendida por el parlamentario para solicitar –y eventualmente, conseguir– más sanciones contra el gobierno y pueblo de Venezuela, ello con el propósito de “salir de la dictadura”. 

 

“Vamos a ejercer más presión y medidas hacia la dictadura y el conglomerado criminal internacional que representa”, escribió en @juanguaido. 

 

Vale la pena destacar que, desde el inicio del periplo, Guaidó incorporó a su discurso una retórica inédita en las arenas políticas criollas, pero bien conocida en las esferas internacionales, en tanto fue la que utilizaron Estados Unidos y sus aliados antes de invadir países como Irak, Afganistán o Libia: vincular al gobierno legítimo del país con el terrorismo. 

 

El pasado viernes 31, durante una entrevista concedida a la periodista Patricia Janiot, Juan Guaidó acusó al gobierno venezolano, encabezado por el presidente Nicolás Maduro, de albergar en el territorio de Venezuela “grupos terroristas” como el ELN, la disidencia de las Farc-EP y Hezbolá y de financiar sus actividades con el oro de la Nación. 

 

Tal parece que las solicitudes de más sanciones contra el país de Guaidó, asunto extremadamente grave en sí mismo, preconizan más injerencia extranjera y la amenaza real de una intervención armada, todo ello bajo la presunta lógica de la “lucha contra el terror”, frase ampliamente proferida por George Bush hijo antes de invadir Afganistán e Irak, hace casi dos décadas. Esperemos que, esta vez, el resultado sea distinto. 

 

(LaIguana.TV)