El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este martes 3 de marzo que el Estado confiscará «todas las reservas y la producción de mascarillas de protección» para distribuirlas al personal sanitario y a las personas infectadas con el coronavirus.

 

«Confiscamos todas las reservas y la producción de mascarillas de protección. Las distribuiremos al personal médico y a los franceses infectados por el coronavirus», informó el presidente en un tuit.

 

Francia ha registrado más de 200 casos de Covid-19 y cuatro fallecidos, por lo que Macron anunció la medida ante la inevitable propagación de la epidemia.

 

«Este martes 3 de marzo de 2020 al mediodía, se informó de 13 nuevos casos, para un total de 204 en toda Francia. Entre estos nuevos casos, se anunció otra muerte esta mañana en Morbihan (Bretaña, noroeste): se trata de un hombre de 92 años», señaló en un comunicado el ministerio de Salud.

 

Superados los 200 casos, Francia se ha convertido en uno de los principales focos del coronavirus en Europa, junto a Italia y Alemania. Esta situación experimentó una brusca aceleración en en apenas una semana, ya que tras haberse constatado 12 casos hace siete días, el sábado de noche llegaban a 100.

 

Además del departamento de Oise (norte de París), principal foco de contaminación, donde los servicios de urgencia médica se ven desbordados, hay otros reagrupamientos geográficos de casos en Alta Saboya (este) y Morbihan.

 

Desde el fin de semana se han tomado medidas más estrictas para evitar una propagación más amplia. En este contexto, se ha pasado a la fase 2 (sobre 3) en la lucha contra la epidemia.

 

Por lo tanto, un centenar de escuelas, colegios e institutos de enseñanza secundaria han sido cerrados, en particular en los departamentos de Oise y Morbihan, medida que afecta a casi 45.000 alumnos.

 

Además, se han prohibido las reuniones de más de 5.000 personas en «ambientes cerrados», por lo que fueron cancelados o postergados muchos conciertos o eventos, como el Salón del Libro o el Salón Mundial de Turismo parisinos.

 

El célebre museo del Louvre, el más visitado del mundo (9,6 millones de personas el año pasado) cerró el domingo y lunes a solicitud del personal, en tanto el martes es su día de cierre semanal, pero no se sabe qué pasará el miércoles.

 

Asimismo, sectores clave de la economía, como el turismo y la industria manufacturera, se han visto afectados a causa de la epidemia.

 

(AFP)