La propagación del coronavirus covid-19 «ha provocado pánico en todo el mundo» y ha acaparado la atención por sus efectos médicos, pero «no vemos los efectos sociales que han surgido» y «el racismo ha encontrado otra excusa para asomar su fea cabeza», denuncia en Facebook Jonathan Mok, un estudiante de Singapur que vive en Londres (Inglaterra, Reino Unido) y recientemente sufrió una brutal paliza por parte de varios jóvenes racistas por sus rasgos asiáticos.

 

Este joven de 23 años sufrió «varias declaraciones racistas» en las últimas semanas, que fueron a más cuando caminaba el pasado 24 de febrero por Oxford Street —una de las calles más concurridas de la capital británica— y escuchó un comentario dirigido hacia él que estuvo acompañado de la palabra «coronavirus»procedente de un grupo de tres o cuatro varones y una mujer que no parecían mayores de 20 años.

 

Cuando se volvió, el emisor le gritó que no se atreviera a mirarle y, tras ese ataque verbal, al menos dos de sus acompañantes le propinaron golpes y uno le dijo : «No quiero tu coronavirus en mi país».

 

Los agresores se marcharon del lugar antes de que llegara la Policía, mientras que la víctima sufrió varias fracturas en la cara y podría necesitar una cirugía reconstructiva para reparar algunos huesos.

 

«El racismo es odio»

 

Mok pide a quienes le dijeron que «Londres no es racista» que «piensen de nuevo», ya que en los dos años que estudia en esa ciudad ha sufrido diversos comentarios racistas, «ya sean inocentes o realizados con malicia».

 

Antes creía que «se basaba en la estupidez», pero ahora está seguro de que «el racismo es odio» y los racistas «constantemente encuentran excusas» para mostrar ese sentimiento y «con el telón de fondo del coronavirus» han encontrado otro pretexto» que les permite «desde negar servicios a una persona de aspecto chino hasta cometer crímenes de odio por motivos raciales».

 

(RT)

Jonathan Mok