Por las redes sociales ha circulado un video en el que una ciudadana uruguaya residente en Milán, Italia, relata su experiencia durante la pandemia del coronavirus. 

 

Entre los datos que resalta la suramericana, destaca que el 22 de febrero se detectó el primer caso de coronavirus y el 11 de marzo –momento de la grabación– ya había más de 10.000 contagios. 

 

Asimismo, resaltó que los afectados pueden presentar síntomas de variable intensidad y duración y que habrá desde quienes puedan pasar el malestar en su casa, como que si sufrieran una gripe cotidiana hasta aquellos que necesiten asistencia respiratoria para poder vivir. 

 

“No es una gripe normal. Es verdad que muchas personas la hacen como una gripe normal, en su casa, con fiebre y sin ningún otro problema, pero es verdad también que muchas personas terminan en terapia intensiva y tienen que estar enchufados a una máquina para poder respirar”, indicó.

 

La residente también precisó que en Milán hay más de 2.000 personas afectadas con el coronavirus que requieren de asistencia para respirar. Se trata de la quinta parte de los afectados en la ciudad y aunque la cifra puede resultar engañosamente baja, realmente no lo es: “ok, no son muchos, es verdad, pero son muchos porque no hay esa cantidad de máquinas acá en Milán, en Lombardía”.

 

Expertos han determinado que la imposición tardía de medidas de contención en países como Italia y España, aunado con la cantidad de residentes mayores de 60 años, explicarían la cantidad de enfermos críticos por coronavirus y el proporcionalmente alto número de decesos –más de 2.000, sobre aproximadamente 25.000 infectados, lo que representa una tasa de letalidad cercana al 8%, la más alta registrada en todo el mundo–, muchos debidos al colapso en el sistema de salud, producto de la infección concomitante en un gran número de personas. 

 

En Milán, producto de la escasez de camas y de equipos para atender a enfermos de coronavirus con síntomas graves, los médicos han tenido que elegir quién vivirá y quién no, como que si de una guerra se tratase: “los médicos acá hacen videos, hacen apelos porque están trabajando 24 horas continuas. Y hacen apelos porque ellos están empezando a tener que elegir a quién salvar, porque si tienen dos personas para enchufar porque no respiran y hay una máquina, tienen que elegir. Y tienen que elegir porque a una de las dos la tienen que salvar”, relató. 

 

Los epidemiólogos también coinciden en señalar que la única manera de frenar la expansión de la pandemia, es limitar drásticamente el movimiento de los ciudadanos, es decir, imponer estados de “cuarentena social”. 

 

Sin embargo, hace varias semanas que milaneses y están en cuarentena y todavía la situación en la región es crítica: 

 

“Nosotros ahora estamos en cuarentena, no nos podemos mover de acá, no podemos salir, no puede entrar nadie. Nos podemos mover sólo si tenemos necesidad de fuerza mayor: quiere decir, ir a comprar la comida, ir a comprar medicinas. Hay policías en la calle que te controlan, te paran y te dicen dónde estás yendo. Las escuelas están cerradas hace más de un mes y acá no estábamos de vacaciones, acá estamos en el segundo cuatrimestre de escuela. Los niños están hace más de un mes en casa y tienen que estar en casa”, señala la internauta uruguaya residente en Milán.

 

Sin embargo, medidas necesarias, aunque extremas, como la cuarentena social, no son del todo comprendidas por todos los ciudadanos. Algunas personas piensan que son exageraciones y otros creen que no se infectarán o que sufrirán una gripe ligeramente más fuerte, sin considerar que una conducta descuidada puede inducir al contagio masivo del virus e incluso, puede ocasionar la muerte de alguien más.

 

En tal sentido, la joven uruguaya insistió: “hay que entender: basta un caso para que después sea una epidemia. Si la gente no entiende que no tiene que tener contacto social, cambiar sus costumbres, es un problema muy grande (…). No se puede tomar mate con otras personas, no hay que darse la mano, besos, abrazos, todo lo que estamos acostumbrados; hay que evitar los lugares en los que hay mucha gente, hay que estar al menos a un metro de distancia de las otras personas. Son todas cosas que aquí se entendieron muy tarde y ahora estamos en esta situación”. 

 

En Venezuela, el pasado domingo, el presidente Nicolás Maduro decretó la cuarentena social en siete entidades: Caracas, Miranda, La Guaira, Aragua, Táchira, Zulia y Apure. Sirva esta experiencia de alguien que vive en el país más golpeado por la pandemia, para comprender que frenar al coronavirus es responsabilidad de todos. 

 

(LaIguana.TV)